San Lorenzo derrotó ayer por 3-2 a Newell’s Old Boys de Rosario como local, tras comenzar perdiendo 0-2, y salió de la zona de descenso directo, en un encuentro válido por la 16ta. fecha del torneo Clausura de fútbol.

De esta manera, el equipo dirigido por Ricardo Caruso Lombardi comparte los cupos de promoción junto Atlético de Rafaela y San Martín, que si la temporada finalizara hoy deberían jugar un desempate por tener el mismo promedio.

Además el Cuervo, que suma 21 puntos y cortó una racha de tres partidos sin ganar, pasó a Tigre, su próximo rival, en los promedios (139 contra 138) y achicó la ventaja con Banfield (141).

Por su parte, el conjunto rosarino, que lo tuvo para golear en la primera etapa, se quedó con 28 unidades, hilvanó la segunda derrota consecutiva y desperdició la oportunidad de trepar a la cima del certamen.

El partido comenzó mejor para el local ya que en los primeros minutos superó ampliamente al rival, controlando la pelota, atacando por las bandas y creando varias situaciones de peligro cerca del área visitante.

En lo que era el mejor momento del local llegó la ventaja de la visita, que poco había hecho para lograrlo. Pablo Pérez se llevó la pelota con la mano (casual), encaró y con un zurdazo dejó sin respuestas a Migliore.

A los 30’, cuando San Lorenzo no había podido recuperarse del golpe del primer gol, en una salida defensiva Pablo Alvarado dio un pase atrás que Fabián Muñoz aprovechó para ganarle la corrida a Nicolás Bianchi Arce y Jonathan Bottinelli, quienes no pudieron cerrar, y ante la salida de Migliore definió fuerte arriba.

Para el segundo tiempo, Caruso Lombardi metió mano en el equipo e hizo ingresar a Leandro Romagnoli, quien se había quedado afuera de los titulares a último momento por una molestia en la rodilla, y terminó siendo clave en la remontada del Cuervo.

A los 5’, el “Pipi” ejecutó el córner desde la derecha que Enzo Kalinski peinó hacia el medio y Emanuel Gigliotti, de palomita, anticipó a Hernán Pellerano para marcar el descuento.

Cuatro minutos después, el recién ingresado Carlos Bueno, en la primera pelota que tocó, le ganó a toda la defensa de Newell’s y conectó, de cabeza, un centro enviado por Julio Buffarini, otro de los puntos altos del “Ciclón”.

Con más coraje que fútbol, San Lorenzo fue para adelante en busca del triunfo ante un ahora desconocido elenco rosarino, y si no consiguió el tercer tanto antes fue por las increíbles fallas en la definición de Gigliotti y el uruguayo Bueno.

Cuando quedaban pocos minutos, Romagnoli encaró del medio hacia la izquierda, dejó a dos rivales en el camino y envío un centro que Gigliotti (goleador del equipo con siete tantos) conectó de cabeza para desatar la locura en el Nuevo Gasómetro.

Así, San Lorenzo irá envalentonado a Victoria para enfrentar, en quince días, a Tigre en una final por la permanencia, mientras que Newell’s, que hasta el descanso era puntero del torneo, intentará recuperarse ante Independiente como local.