Como un equipo. Son compañeros de trabajo, son todos de Boca y tienen la cábala de poner las canciones de "La 12" en los parlantes que venden.

Si bien los partidos de fútbol, sobre todo las finales se ganan con táctica, juego en equipo buen fútbol y con goles, los hinchas apuestan también a las cábalas o amuletos para dar aliento a sus colores. Los sanjuaninos no están exentos de esta práctica, que si bien saben que no es muy efectiva la realizan de manera sistemática, cada vez que juega su equipo.


Usar la misma remera de todos los superclásicos, ver el partido con determinada gente "que trae suerte" y sentarse en la misma silla de siempre son algunas de las cábalas que los sanjuaninos pondrán en práctica esta tarde.


Los hinchas de Boca y River admitieron que no siempre las cábalas sirven, pero que les ayudan a calmar los nervios y a sentirse más seguros. "Con mi marido comemos siempre pizzas cuando juega River y esta vez almorzaremos a las 17 para comer lo mismo", dijo entre risas Susana Páez, una fanática del fútbol.


Por su parte, Roberto Ruarte, un "enfermo de Boca", como él se definió dijo que no duerme desde hace dos noches de los nervios que tiene. "Mis hijos me retan, pero soy muy fanático. Es más le dije a mi esposa que ni me hable durante el partido. Mi cábala es usar un rosario que me regalaron cuando era chico", dijo el hombre.

>Los que no pueden

Si bien muchos trabajadores sanjuaninos tendrán la posibilidad de ver el partido en sus puestos laborales, otros comentaron que estaban muy angustiados porque no iban a poder disfrutar de la gran final. Es que los dueños de varios locales comerciales no autorizan a sus empleados ni a que lo escuchen por radio. "Nos enteraremos el resultado según los gritos de la gente o lo que nos informen los clientes", dijo con un tono triste Federico López, un empleado fanático de Boca.

>De la motorizada

"No podré ver el partido, por eso me puse la camiseta -de River- hoy. Soy motorista y no puedo ni escucharlo por radio", dijo Mauro Mallea, un joven que es policía desde hace pocos meses y que ayer paseó junto a su familia por el microcentro. Comentó que no disfrutará de la final de la Copa Libertadores, pero que sin embargo hará mucha fuerza para que los colores de su "corazón" obtengan un buen resultado durante el primer enfrentamiento entre River y Boca.