El bahiense Emanuel Ginóbili, figura emblemática del seleccionado argentino que afrontará desde el martes y hasta el 11 de septiembre el Preolímpico de Mar del Plata, advirtió que el representativo nacional debe darse cuenta “que ningún rival” le va a “jugar bonito, sino que todos saldrán a empujar y poner”, por lo que “habrá que ser más duros que los demás si se pretende clasificar”.

“Si pensamos que todos los rivales nos van a facilitar las cosas jugando de igual a igual, estaremos equivocándonos mucho. Nos van a jugar fuerte, empujándonos y cortándonos permanentemente. Y si nosotros no actuamos igual de duro no iremos a Londres el año que viene”, advirtió ayer Emanuel Ginóbili en una entrevista realizada por el programa radial Deportivo Télam.

“Por eso me quedé tan desilusionado con lo que hicimos a partir del tercer cuarto frente a Venezuela, más allá de que no me gustó despedirnos así de la gente en un Luna Park que estaba colmado”, se lamentó.

Para “Manu” es “fundamental que el equipo mantenga la intensidad durante los 40 minutos de partido y no solamente en media hora, porque no va a alcanzar”.

“Lo que pasa también es que en la preparación resulta agobiante jugar tres veces contra el mismo rival, tal como sucedió frente a Venezuela”, apreció.

“Las características de nuestro equipo son las de defender duro, manejar la pelota y atacar el aro. Pero para ser superiores a nuestros adversarios debemos realizar esas tres cosas simultáneamente y no por separado, porque así no se establece supremacía”, describió.

Ginóbili sostuvo que lo peor que le puede pasar al equipo argentino “es darse el lujo de quedarse estancado en el juego. Nuestra responsabilidad es jugar bien siempre y en todo momento”, remarcó.

En consonancia con estas apreciaciones del jugador de San Antonio Spurs, su compañero, el “Lancha” Carlos Delfino, reconoció que el juego fuerte practicado antenoche por los venezolanos “será el mismo que sufrirá Argentina en cada partido del Preolímpico”.

“Pero, por otro lado, nos viene bien que nos haya pasado esto justo en el último partido antes del Preolímpico, ya que sirve que nos hayan raspado y sacudido un poco para darnos cuenta que este torneo no va a ser un paseo de salud para nosotros”, argumentó.