Bien sabido es que la figura chilena Alexis Sánchez estuvo en San Juan el agosto del 2007 cuando San Martín le ganó a River, en Concepción. En ese partido, el Niño Maravilla ingresó en el segundo tiempo por Mauro Rosales y fue el debut con la camiseta del Millo.

Pero esta no fue la primera vez que Alexis estuvo en San Juan. Además de su reciente paso con su selección enfrentando a México por la Copa América hace 13 días, estuvo en el 2002 participando de un torneo amistad en el Deportivo Rincón de Albardón en donde maravilló a todos y en el cual mostró todas sus condiciones que lo llevaron a ser pretendido por el mejor equipo del mundo en la actualidad, el Barcelona.

Sánchez llegó cuando tenía 14 años a disputar este torneo y fue defendiendo los colores de la Academia Taltora de La Serena, que en esos años era un habitué del club de Albardón jugando con sus divisiones inferiores. En esa oportunidad la estrella chilena fue hospedada por Esteban López, que en ese momento era dirigente del Deportivo Rincón y tuvo la oportunidad de conocer a una futura estrella. +Ya era un crack a sus 14 años. Nos dejó boquiabiertos a todos los que pudimos verlo jugar en ese año+, contó Esteban López sobre el Niño Maravilla.

Alexis estuvo quince días en San Juan en los cuales comía y dormía en la casa de Esteban. Es por eso que la relación dejó su marca en la familia albardonera que hasta el día de hoy recuerda al delantero chileno por su humildad. +Era un chico que venía de una familia muy humilde en el cual el sostén era el papá que trabajaba de minero y estuvo un año sin ver a sus hijos. Yo creo que por esto, Alexis era un chico muy disciplinado que media hora antes de la hora de citación para jugar, ya estaba listo. Además no le gustaba salir de noche porque el entrenador les pedía que no lo hicieran y él respetaba esa orden. Un excelente chico+.

Pero para Esteban lo más destacado del adolescente Alexis Sánchez eran sus dotes futbolísticas. +Más allá de la tremenda habilidad que tenía para jugar, al chico le pegaban patadas y eso no lo asustaba. Se levantaba y agarraba la pelota para seguir jugando y haciendo goles. Era un fenómeno+, relató Esteban quien confesó que +ya tengo la entrada para verlo mañana (por hoy) y seguir disfrutando de su juego como lo hice en el 2002 en la cancha de mi equipo.