Feriado. Sol y un clásico en oferta futbolística terminaron armando el combo al que el hincha de San Martín decidió darle su respaldo. Esta vez, con mucho mejor marco que en el debut contra Aldosivi, el estadio Hilario Sánchez mostró una postal más cercana a las grandes tardes en la historia de San Martín. Sorprendieron las colas en las boleterías con el partido ya casi comenzado, anunciando un buen marco para el partido contra La Lepra. Y fue así nomás.
La Popular Norte terminó colmada y alentando como en esas jornadas en las que San Martín conmovía. Deliraron con los tres primeros goles y hasta tiraron flores para todos, siendo Barone el principal destinatario de los aplausos. Luego, cuando se vino encima Independiente, el aliento fue ensordecedor para tratar de sostener el resultado. Ni hablar del éxtasis tras el último gol de Barone que sentenció el clásico para que el Pueblo Viejo se vistiera de fiesta como se lo merece toda la rica historia de San Martín.

