El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, cayó ayer ante Sudáfrica 22-17 en su segunda presentación en el Rugby Championship, aunque esta vez dejó una imagen muy superior a la que había mostrado en Johannesburgo en su debut. El representativo albiceleste estuvo muy cerca de vencer a los sudafricanos por primera vez en la historia, pero en los tramos finales del partido un par de penales del infalible Morné Steyn le dieron la victoria a los Sprinboks, que en el Malvinas Argentinas se vieron sorprendidos por un equipo que no los dejó jugar, pero en el cierre sacaron a relucir jerarquía para sumar su segundo triunfo en el torneo.
Los Pumas jugaron un partido inteligente. Tuvieron buena obtención de pelota, dominaron las situaciones de contacto, y frenaron casi siempre los intentos visitantes con tackles demoledores. Pero cometieron demasiadas infracciones y las terminaron pagando con una derrota, que no duele tanto como la sufrida en el Soccer City, pero al fin de cuentas no deja de ser una nueva frustración. En el otro partido Nueva Zelanda venció 27-16 a Australia.