Lionel Messi cumplió ayer, por la tarde, una jornada de trabajo liviano en el predio de Ezeiza. El rosarino, que fue figura en el encuentro ante Costa Rica, se limitó a un ejercicio regenerativo en el gimnasio y después contempló, distendido, el resto de la práctica en la que los titulares trabajaron por un lado y los suplentes, por el otro.
Messi estuvo acompañado por Sergio Agüero, Fernando Gago y Angel Di María al borde del campo de juego, en el que el técnico Sergio Batista ordenó un ensayo de fútbol con un selectivo de juveniles. Para ese equipo de prueba, además del arquero Mariano Andújar, jugó el delantero Ezequiel Lavezzi, quien no podrá actuar en el compromiso de cuartos de final por el límite de dos tarjetas amarillas.
Con un clima relajado, los jugadores argentinos completaron el entrenamiento y luego recibieron la visita de sus familiares.
Hoy se repetirá la jornada de trabajo en horario matutino y por la tarde los futbolistas gozarán algunas horas libres, como sucedió después del traumático empate frente a Colombia.
Argentina jugará su partido de cuartos de final el sábado próximo a las 19.15 en la cancha de Colón de Santa Fe, donde fue silbado cuando empató con Colombia.