Buenos Aires.- Edgardo Bauza hizo saltar los maníes de la mesa, en el predio de Ezeiza. El DT miraba por televisión el partido entre Barcelona y Atlético de Madrid. Iban 12 minutos del segundo tiempo en el Camp Nou cuando Lionel Messi se tomó el aductor de la pierna derecha tras pelear una pelota con el defensor uruguayo Diego Godín. La Pulga salió reemplazado inmediatamente, otra vez con dolor en la zona del pubis, lesión que lo había marginado del partido de la Selección ante Venezuela.

Según el parte médico del Barcelona tras el partido, Messi sufrió ‘una rotura muscular en el aductor del muslo derecho’ y necesitará por lo menos tres semanas para recuperarse. El Patón ya empieza a pensar en una Selección sin Messi para enfrentar a Perú (en Lima, el 6 de octubre) y Paraguay (en Córdoba, el 11) por las Eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Rusia 2018.

Sin embargo, rápidamente llegó una posible solución para el entrenador de la Selección Argentina. El Barsa ganaba 1-0 por un gol del croata Ivan Rakitic, pero tras la salida de Messi el Atlético llegó al empate. Diego Simeone mandó a la cancha a Angel Correa y el exSan Lorenzo clavó el 1-1 -sería definitivo- con una gran definición de derecha tras dejar en el camino a Javier Mascherano.

Al final terminaron en empate, pero ambos contaron con situaciones para sumar de a tres. Primero Ter Stegen le ahogó el grito a Godín que ganó en el área rival de cabeza. Y después Jordi Alba, tras una gran jugada de Neymar, pudo darle la victoria al local, pero su zurdazo cruzado se desvió en un defensor y salió por encima del travesaño.