Barcelona, 1 de mayo.-El Barcelona demostró su personalidad en El Madrigal, para levantarse a lo campeón, eliminado en las semifinales de Liga de Campeones por el Inter de Milán, y se desquitó goleando al Villarreal, para trasladar la presión al Real Madrid en la trigésimo quinta jornada liguera.

El pulso por la Liga llega a la recta final con el Barcelona mostrando su cara demoledora en una de las fechas más complicadas que le restan en el campeonato. Los jugadores de Pep Guardiola sacaron el carácter para agarrarse con fuerza a su ventaja por el único título que ya tienen al alcance.

Camino del récord histórico de puntos, con 90 a falta de tres jornadas, el Barcelona aguantó la salida en tromba del Villarreal. Aceptó de buen grado dos fallos claros en el remate del brasileño Nilmar, para sentenciar con Xavi Hernández al mando.

Asistió a Lionel Messi en el primero (min.18), para convertirse en el mejor pasador de la Liga, y marcó de falta magistral a la escuadra el segundo (min.33). Bojan, que sentó a Zlatan Ibrahimovic en el banquillo, se disfrazó de Messi para marcar el tercero (min.41), en una acción que se marchó de todos los defensas con velocidad y un auto pase antes de definir con calidad.

Se relajó en la segunda mitad, con los deberes hechos para acabar 1-4 con Messi cerrando el festival goleador. Desvía los focos hacia el Real Madrid. Cuatro puntos de ventaja antes de recibir en el estadio Santiago Bernabéu a Osasuna.