Buenos Aires, 28 de octubre.- La temperatura del encuentro que animaron Racing y Lanús en el "Cilindro de Avellaneda" llegó a la cúspide cuando Mauro Camoranesi y Patricio Toranzo fueron partícipes de un tumulto y correspondientes golpes en la mitad de la cancha. El referí no los perdonó y los envió a las duchas a ambos cuando apenas iban 31 minutos de juego.

Pero no todo quedó ahí: el campeón del mundo en 2006 con la Selección de Italia se dirigió inmediatamente hacia la posición del ex volante de Huracán, que estaba en el piso, y le propinó una patada brutal, descalificadora y cobarde en su rostro. Como si fuera poco, insultó a Diego Simeone camino a los vestuarios y se tomó los testículos.

Por su parte, el "Pato" se retiró del estadio al trote y con una "calentura" que se le notaba a cientos de metros: tomó una botella de agua y la revoleó con furia, antes de emprender el trayecto a los vestidores.