Grandes animadores, se estima Alberto Contador, que luego se retirará y Chris Froome que intentará ganarla por primera vez.

 

La ciudad francesa de Nimes, será la que encenderá el fuego en la última grande del año: La Vuelta a España. Un recorrido esencialmente montañoso, el calor, una contrarreloj larga y algunos complicados traslados componen un combo que deberán sortear una pleyade de figuras del ciclismo en ruta.

Sin Alejandro Valverde, recomponiéndose de sus lesiones tras la rodada en el Prólogo del Tour de Francia, sin Tom Dumolin vencedor del Giro de Italia y de Nairo Quintana, liderarán el pelotón Alberto Contador (triple ganador en 2008, 11 y 14), que anunció su retiró tras esta prueba y Christopher Froome (segundo en 2011, 14 y 16) quien buscará subir al peldaño más alto del podio y hacer doblete con el Tour, que ganó hace un mes.

La contrarreloj individual de 13 kilómetros, que se realizará en Nimes, coronará al primer malla ‘roja’, luego la lucha tendrá preeminencia en la montaña, donde habrá nueve llegadas en alto y muchas variantes en los ascensos que deberán sortearse a diario.

La presencia de los italianos Vincenzo Nibali (ganador en 2010) y Fabio Aru (vencedor en 2015), más el colombiano Esteban Chavez (tercero en 2016), todos con ánimo de encauzar una temporada que no les fue muy propicia, van completando el cuadro de candidatos.

A ellos se sumarán el francés Romain Bardet (debutante), el ruso Ilnur Zakarin y un grupo de jóvenes que tratarán de dar un batacazo. En este grupo se encuentran el luxemburgués Bob Jungels, los australianos Simon y Adam Yates, los españoles Javier Roson y Marc Soler y los colombianos Carlos Betancur y Miguel Angel López.