El colombiano Nairo Quintana atacó ayer en los Alpes al líder del Tour de Francia, Chris Froome, y le recortó 30 segundos, mientras que el campeón de la edición pasada, Vincenzo Nibali, se impuso en una etapa de 138 kilómetros que partió de St. Jean de Maurienne.
A falta de un día de montaña por disputarse antes del recorrido triunfal por París, Froome tiene 2m38s de ventaja sobre Quintana, que atacó al británico en un emocionante final para acabar segundo la etapa y recortar terreno.
El español Alejandro Valverde, que finalizó a 2m26s del grupo de favoritos, mantiene el tercer puesto a 5m25s de Froome.
Nibali, que se desenganchó de la lucha por la general tras una dura primera semana y un mal día en la primera etapa en los Pirineos, se escapó del pelotón principal a 61 kilómetros de la meta.
En su camino a la victoria, el italiano dio caza y dejó atrás al francés Pierre Rolland en la última ascensión, una escalada de 18 kilómetros hasta la estación de esquí de La Toussuire con una pendiente media de un 6,1 por ciento.
El líder del Astana entró en meta con 44 segundos de ventaja sobre Quintana que ayer recortó hoy 32 segundos a Chris Froome en la lucha por el maillot amarillo del Tour y prometió atacar de nuevo hoy en el Alpe d’Huez”desde más lejos”. “Pensábamos recortar más tiempo, pero Froome se ha defendido bien, todavía está fuerte. Mañana (por hoy) volveremos a intentarlo desde más lejos. El final me va bien, vamos a tratar de controlar para conseguir también la victoria de etapa”, señaló el jefe de filas de Movistar.
“El ritmo era bastante veloz, era tontería atacar antes porque el ritmo del Tinkoff era alto. Pensábamos que no habría mucha diferencia en ese tramo. Atacamos donde pensábamos que era posible”, indicó el colombiano.
La etapa 20, considerada la “reina” unirá Modane y l’Alpe d’Huez con un total de 110.5 kilómetros de distancia, en la cuarta y última jornada alpina. El ascenso de 13,5 kms, con una pendiente de 8,1 por ciento y sus 51 curvas determinará quien ganará la presente edición del Tour.