Al frente. Maximiliano Scarpin, de Obras, vence al doble bloqueo de Alejandro Toro y Fabián Flores, de Lomas. Luego de un partido cambiante y plagado de emociones, el local ganó 3-2 y descontó en la serie. Mañana juegan el cuarto de nuevo en el Cantoni.

Habían jugado más de dos horas y media. Estaban extenuados. Obras tenía match-ball en base a juego, garra y corazón. Sacó para el local Javier Jiménez. Tras la recepción rival remató Alejandro Toro. Pero el doble bloqueo de Osmany Camejo y Bruno Lima pudo más. El tie break se cerró 17/15 para Obras. El triunfo (3-2 para el local) fue delirio en el Cantoni. La serie quedó 2 a 1 para Lomas en estos cuartos de final de la Liga Argentina A-1 de Vóleibol. Mañana seguirá la historia. Lo cierto es que Obras está vivo. Está obligado, de nuevo, a ganar. Pero ese sabor ya lo conoció, por lo que nada es imposible en lo que queda.

El partido de anoche fue cambiante, con muchos matices. Lo terminó ganando el equipo que dio todo. El que apretó los dientes y demostró que puede con sus propias armas, ante un rival superior en potencialidad pero más frágil anímicamente.

El primer set marcó un claro dominio visitante. Lomas mostró un juego equilibrado mientras que Obras tuvo altibajos que le costaron caro. La visita tuvo un juego sólido, siendo letal en sus ataques y bloqueos. Obras quedó sin reacción. Fracasó en la recepción y careció de consistencia. Perdió sin remedio 25/17.

Lo aprovechó. Osmel Camejo le da fuerte ante un dividido bloqueo rival. Obras, que empezó desconcentrado, sacó a relucir su juego y ganó en el tie break.


 

Todo cambió en el segundo. Se dio una razón fundamental: Obras entró en partido. Se mostró concentrado y ya no cometió muchos errores forzados. Entonces, con una renovada y acertada recepción más la efectividad de los cubanos Osmel Camejo y Javier Jiménez, luchó el parcial punto a punto. La definición se estiró hasta pasados los 30 puntos. Y lo terminó ganando Obras, a puro corazón, por 33/31. Ese resultado condicionó lo que se dio después. Es que Lomas quedó tocado anímicamente.

Tanta fue la caída psicológica del visitante que sus principales armas en el juego se desvanecieron. Obras lo aprovechó y ganó con un cómodo 25/16 el tercero.

El cuarto set marcó la recuperación del visitante. El DT Silva le metió manos al banco y encontró respuestas. Dejó en claro que Lomas es un equipo balanceado y con variantes. Ganó la visita 25/21. Y el tie break fue parejo. Con la emotividad propia de una definición cerrada. Y Obras sacó ese plus que le valió la victoria.

Fotos: Marcos Carrizo