Ariel Navarro repasa las fechas del viaje y de la competencia y sutilmente se transforma el tono de su voz. Hasta que admite directamente que “ya empieza a crecer la ansiedad por querer llegar y empezar a caminar por los circuitos. Ahí es cuando uno puede ver realmente las condiciones y la posibilidad de alcanzar el objetivo”.
El sanjuanino integra la selección argentina que participará en la centésima edición del ‘International Six Days of Enduro (ISDE)’ que se disputará desde el 30 de septiembre en Cerdeña, Italia. El próximo viernes 20 volará al Viejo Continente y durante la semana previa a la competencia recorrerá a pie los circuitos. “Mi primer objetivo es terminar. Eso, por mi edad, ya es un logro. Y en segundo lugar, alcanzar una medalla de plata sería un gran premio. A nivel equipo, creo que estaremos entre los 20 mejores”, afirmó el piloto.
En el ISDE compiten más de 500 pilotos, agrupados en equipos que representan a países. A su vez, a nivel individual cada piloto puede aspirar a conseguir el triunfo en su categoría, una medalla de oro (para aquellos que no superen el diez por ciento del tiempo del vencedor), o una de plata (no más del 30%). Y todo aquel que cumple con el recorrido completo se lleva una medalla de bronce. “A la medalla de oro no creo que llegue porque tengo la referencia de la fecha del Mundial que se corrió en San Juan, pero la de plata es posible”, reiteró Navarro.
Para los enduristas un Six Days representa un desafío mayor que una fecha del Mundial. “En un mundial son unas cinco horas arriba de la moto durante dos días. En un Six Days, son unas 7 horas por día durante cinco jornadas. En la última hay un especial sólo de motocross”, comparó el sanjuanino de 40 años.
Navarro señala que a su edad debe entrenar “el doble que un pibe. La edad te suma experiencia, pero no velocidad”.
Ariel puede hablar de experiencia porque esta será su cuarta participación en un ISDE. Consiguió medalla de bronce en Chile 2007, logró la de plata en México 2010 y no pudo completar el recorrido en Finlandia 2011 por desperfectos en la moto. Si no corrió más ediciones fue seguramente porque empezó ‘tarde’ a practicar enduro: a los 28 años.
“Me empecé a cebar en el 2006, cuando corrí un Latino en México y terminé entre los diez mejores”, recordó.
La edición del año que viene se realizará por primera vez en Argentina y San Juan ya fue el escenario escogido por la FIM. ¿Representa para Ariel una presión extra en lo deportivo para esta carrera? “Vamos con presión, pero recae más en los chicos que van con aspiraciones de estar en la punta. Integro la selección por la experiencia que acumulé y voy a dejar todo para cumplir con el primer objetivo, que es terminar, y eso ayuda al equipo”. Además, reconoce que ya está pensando en la próxima edición, donde será local: “Será más exigente. Nuestros terrenos son más duros y costará bastante. De todos modos para eso falta y habrá nuevas competencias a nivel nacional para definir esa selección”. Antes está Italia.