Obra cumbre. El colombiano Angulo no llevaba ni diez minutos en cancha. Unión ya era otro y buscaba la victoria con otros argumentos y llegó ese momento mágico para el cafetero que aprovechó a pura potencia para anticipar y marcar el único gol del partido.
Incansable. Roberto Martin aprovechó su chance como titular. Se comió el lateral derecho y no mezquinó nunca. 


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Es de sabios saber cambiar a tiempo. Es de humildes buscar otro camino cuando el inicial no da resultados y en alto tan dinámico como lo es el fútbol, Atlético Unión supo cambiar de receta en el momento justo y a la hora señalada para terminar ganando su primer partido en la fase Campeonato del Torneo Federal A, derrotando por 1-0 a Chaco For Ever que con mucho orden y escasas ambiciones, desnudó por bastante tiempo del partido las limitaciones futbolísticas del planteo inicial del cuadro sanjuanino. La entrada del inoxidable Luto Molina para encontrar otros caminos y la potencia del colombiano Jhony Angulo terminaron siendo la solución desde el banco cuando parecía que no se podía y Chaco se defendía bien. Pero en esos últimos 25 minutos de partido, Unión fue el que todos querían, con profundidad, potencia y contundencia. En esos últimos 25 minutos de partido, la otra receta dio resultado.


En el comienzo, como era de esperar, la ambición y la necesidad de Unión lo pusieron a presionar y rápidamente se quedó con la pelota. El problema empezó ahí porque si bien la tenía, faltaba profundidad, creación y desequilibrio para poder romper el ordenado esquema de Dechat, que se refugió contra su arquero y le dejó que el peso de las limitaciones de Unión lo ayudaran a mantener el cero en su valla. Unión asustó con un tiro libre de Guille Pereyra y después con un cabezazo de Bernay pero luego, perdió peso arriba, se quedó sin circuitos y se hizo inofensivo. En el complemento, la ansiedad empezó a desnudar limitaciones en el retroceso sanjuanino y Chaco For Ever se animó con Magno y con el lungo Fernández. Pero llegó hasta ahí.


Unión decidió otro libreto. Cambió de protagonistas y el entregó el protagónico al Luto Molina que con sus sutilezas empezó a encontrar esos caminos que no se veían. Hubo un par de asistencias profundas para Cristian Pérez que apareció adelantado, después otras proyecciones de Roberto Martín por la derecha y con eso, el Azul ya se entonó definitivamente. Así, a los 28’ la sacó Molina para Pereyra y el ex-Trinidad metió el pase profundo al corazón del área para que el jachallero Pérez la bajara, controlara y midiera el pase para el colombiano Angulo que a pura potencia, anticipó y terminó abriendo el marcador cuando no se podía.


Se soltó más Unión después de ese espaldarazo anímico y fue a buscar la liquidación. Martín llegó al fondo, habilitó a Angulo y milagrosamente Casteglione la sacó al corner. Chaco se sacudió tarde y fue a buscar un empate que parecía tenerlo ya abrochado. Arriesgó pero no le alcanzó y Unión, sabiendo que el triunfo era indispensable, se vistió de overol para sostener ese 1-0 que tanto necesitaba y que tanto le costó forjar.


 

Las Claves
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Reacción
El mérito de Unión estuvo en la capacidad para saber modificar a tiempo el sistema y la propuesta a la que la había adormecido el orden de Chaco. Cambió a tiempo y lo ganó.
 

Desequilibrio
El talento inagotable del Luto Molina sigue siendo una carta ganadora a la que Unión tiene que apelar cuando no salen las cosas. Otra vez, su desequilibrio fue elemental para ganarlo.
 

Actitud
No sólo es saber ganarlo sino también querer ganarlo. Ese faceta también fue soporte vital para que Unión pudiera reencauzar este arranque en la Fase Campeonato del Federal A.