El filipino Manny Pacquio, titular welter de la OMB, retuvo antenoche la corona al vencer por puntos, en fallo unánime, al ghanés Joshua Clottey. El combate tuvo como escenario el flamante estadio de fútbol americano de los Cowboy de Dallas y no respondió a la gran expectativa que generó, ya que Pacquiao apenas se exigió para ganar con comodidad ante un demasiado cauteloso Clottey, quien se conformó con no perder antes del límite.

Las tarjetas fueron el fiel reflejo de lo que sucedió en el ring: 119-109 (dos) y 120-108.

El pegador filipino, que era ampliamente favorito para retener la corona, sorprendió antes de la pelea al anunciar que el final de su carrera estaba "cercano". "Falta poco para unas elecciones en mi país donde puedo ser un congresista y creo que ya estoy muy cerca del final de mi carrera", afirmó.

Pero eso no pareció afectar su rendimiento y anoche se llevó la pelea de cabo a rabo, sin pasar sobresaltos, ante más de 50.000 personas que esperaban mucho más de la contienda.