El goleador Martín Palermo le dio un susto al entrenador de Boca, Alfio Basile, al retirarse minutos antes de finalizar la práctica en el predio de Casa Amarilla, porque sintió una molestia muscular, pero posteriormente se comprobó que fue sólo un calambre y podrá jugar el domingo en Sarandí, frente a Arsenal.
