En una semana, tres partidos. Sportivo, ya metió uno y las cuentas de cara a la clasificación indican que esta noche, el verbo a conjugar es ganar para consolidarse entre los aspirantes a las dos plazas que otorga la Zona 3. Con ese objetivo, Desamparados recibirá hoy -desde las 21.45- al urgido Gimnasia de Mendoza que pelea por zafar de la Promoción como sea. No será sencillo el tema porque si bien en las estadísticas, Sportivo es más que favorito, sólo con mencionar que en esta temporada no ha podido ganarle a Gimnasia en tres partidos, lo dice todo.
La semana que arrancó el pasado domingo para Sportivo con la trascendental victoria en San Luis, terminará este domingo próximo a las 19 en Salta pero primero está el choque de esta noche en Puyuta y lo único que le sirve al equipo de Magistretti es ganar como para perfilar su clasificación.
En lo futbolístico y después de los dos triunfos consecutivos que lo reacomodaron en puestos de clasificación, Magistretti no se apartará del modelo con enganche y solamente realizará un cambio en la defensa a raíz de la suspensión de Daniel Gómez. Su reemplazo será Darío Medina, quien volverá después de un partido ya que estuvo ante los santiagueños. El resto igual, con Núñez de armador y la dupla Fernández- Arrigo en la ofensiva.
Del otro lado estará el Gimnasia de Ricardo Dillon. Un técnico con mucha historia en Sportivo y que armó este actual plantel. El Lobo no viene bien. Ganó solamente 5 partidos en la temporada y necesita puntos cuanto antes para intentar la salvación. En lo futbolístico, Dillon realizará solamente un cambio y pondrá a Mauricio Arce en el medio, reemplazando a Ignacio Ruiz, buscando más equilibrio. El resto, igual con varios conocidos como Andrés Villafañe, Martín Bidal, Adrián Benito y Silvio Prieto entre los titulares.
Para Sportivo, los tres puntos tendrán color de clasificación. Eso esta claro y hoy, lo que necesita es ganar para meterse entre los 8 mejores del torneo. Gimnasia y varias caras conocidas están en el medio pero Sportivo no puede darse el lujo de regalar nada.

