Digan lo que digan, cuando no hay fútbol, el deporte también existe. Y vaya si es cierto, porque miles de sanjuaninos, por ejemplo, despidieron ayer una semana mágica. De pura actividad. De total admiración. Y de increíbles emociones. Cuatro picos se quedaron con la atención general sin que el fútbol nuestro (nadie puede renegar de él) apareciera. Es cierto, arrancó el fútbol de verano en Mar del Plata pero seguro que pocos se sentaron al frente del televisor a ver lo que pasaba en La Feliz. Es que no hay dudas que llegaron cansados a casa luego de disfrutar otros espectáculos dignos de ser seguidos por multitudes increíbles.

En orden de asistencia de espectadores, el paso del Rally Dakar por estas tierras impregnaron de locura. Es más, en el primer día asistieron nada más ni nada menos que alrededor de 120.000 personas. Y, en el segundo, en la despedida fueron casi 80.000. Todos enloquecidos por ver algo inusual.

En el segundo escalón se ubicó la Vuelta Ciclística a San Juan. Esa tradicional competencia que el año que viene cumplirá sus primeros 30 años y que mantiene su vigencia. Vaya a saber cuántos espectadores se volcaron a la ruta durante las distintas etapas que visitó diferentes departamentos. Y que ayer, en el anillo de la Circunvalación, cerró otra función histórica, que tuvo miles y miles de aficionados alentando a los heroicos ciclistas.

Tercero queda la doble presentación del equipo de vóleibol de UPCN, que justo en esta semana recibió en el Cantoni a sus dos rivales (Bolívar y Buenos Aires Unidos) por el título de la Liga Argentina. El escenario cubierto mayor presentó un marco acorde a la importancia de ambos encuentros.

Y al final la fiesta de los niños. Esa que se dio otra vez de la mano del Club Atlético Trinidad y que, durante toda la semana, tuvo como protagonistas a los pequeñines que son futuras esperanzas de nuestro fútbol. Por eso ¡que semanita!