Dolido. el capitán de Boca no se guardó nada.

El mediocampista y capitán de Boca Juniors, Pablo Pérez, se opuso a volver al estadio Monumental para jugar la superfinal revancha de la Copa Libertadores ante River Plate, al justificar que que no podría presentarse "en una cancha que no brinda seguridad". "No puedo jugar en una cancha donde me pueden matar. ¿Cómo voy a ir a jugar a una cancha que no brinda seguridad? ¿Y si ganamos y damos la vuelta en su cancha? Me matan", especuló Pérez a la salida del sanatorio Otamendi, donde se sometió por tercera vez al control por la lesión que sufrió en el ojo izquierdo por la agresión al micro del plantel "xeneize", el pasado sábado. El capitán afirmó que no opinará sobre una posible sanción a River Plate pero fijó su postura. El mediocampista relató cómo vivió el plantel la llegada al recinto de Núñez y calificó todos los hechos como "una vergüenza"."No sé qué pasó porque fue muy raro. Estaba toda la gente de River acumulada en el mismo lugar. Fueron estallidos constantes", contó.