Melbourne, EFE
La escudería Brawn GP entró en la historia de la Fórmula Uno al lograr el doblete en el día de su debut en el Gran Premio de Australia, gracias a la victoria del británico Jenson Button y al segundo puesto del brasileño Rubens Barrichello.
Button y Barrichello eran los grandes favoritos para conseguir el doblete y el sábado habían dominado la sesión de clasificación. Ayer el británico dominó la carrera desde la salida a la meta sin abandonar en ningún momento el primer puesto y sin ser inquietado.
Peor lo pasó el veterano Rubens Barrichello, que tuvo una mala partida y eso le hizo perder siete puestos y provocar un accidente en la primera curva en la que tocó al australiano Mark Webber (Red Bull-Renault) y este al alemán Nick Heidfeld (BMW) y el finlandés Heiki Kovalainen (McLaren-Mercedes), que no podía evitarlos se tenía que retirar.
Barrichello, con un coche con el alerón delantero roto y el difusor trasero también tocado, se vió obligado a remontar y al final tuvo la suerte de que el alemán Sebastian Vettel (Toro Roso-Renault) y el polaco Robert Kubica (BMW), que eran segundo y tercero respectivamente, se eliminaron a dos vueltas del final cuando el polaco intentaba conquistar el segundo puesto.
La carrera fue neutralizada para retirar los restos de los coches y Button pudo cruzar victorioso la línea de meta por delante de su compañero de equipo, que había logrado un afortunado e inesperado segundo puesto. El podio lo completó el italiano Jarno Trulli (Toyota), aunque luego fue recargado con 25 segundos y pasó a ser 12mo en la clasificación final.
En tanto que el campeón del mundo, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), realizó una carrera extraordinaria, ya que salía desde la última posición y remontó hasta la cuarta. Con la sanción a Trulli, pasó a ser 3ro.
Sebastian Vettel fue el único que pudo seguir el ritmo de Jenson Button durante toda la carrera y sorprendía a propios y extraños, el coche de seguridad que salió a la pista tras el accidente del japonés Kazuki Nakajima, permitió a Kubica acercarse al alemán y a tres vueltas del final intentaba el adelantamiento, ambos coches se tocaban y terminaban eliminados.

