Los ex jefes de la barra brava de River Alan y William Schlenker fueron condenados ayer a prisión perpetua como “instigadores” del homicidio del lugarteniente de una facción rival de “Los Borrachos del Tablón”, Martín Gonzalo Acro, en agosto de 2007. Sin embargo, por ahora no irán a prisión: en voto dividido, el Tribunal Oral en lo Criminal 15 resolvió mantener las excarcelaciones hasta tanto se pronuncie en apelación la Cámara Nacional de Casación Penal, aunque obligándolos a cumplir reglas de conducta.

Esas medidas incluyen la prohibición de salir del país, la entrega de los pasaportes, no ausentarse de sus domicilios por más de 24 horas sin dar aviso al tribunal y presentarse del 1 al 5 de cada mes ante la Justicia. La misma pena de prisión perpetua recibieron otros tres barras bravas: Ariel “Colo” Luna, Rubén “Oveja” Pintos y Pablo “Cuca” Girón, que llegaron detenidos al juicio y permanecerán en esa situación.

El tribunal consideró a los cinco acusados responsables del “homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas, en concurso real con tentativa de homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas”, en este último caso por las heridas que recibió Gastón Matera, quien acompañaba a Acro.

El sexto imputado, Martín “Pluto” Lococo, fue condenado a diez años de prisión -y también continuará en libertad- como “partícipe secundario” del crimen.