Ni Juan Antonio Pizzi, ni Jorge Burruchaga, ni Juan Manuel Llop, ni Martín Palermo. Ninguno de los nombres mencionados y que sonaron para reemplazar a Facundo Sava como técnico de San Martín se hará cargo del plantel desde el próximo lunes en Concepción. El elegido por la Comisión Directiva del Verdinegro es Gabriel Gustavo Perrone, de 47 años, y quien tuvo su último paso como entrenador en el Rangers, de Chile, club al que renunció en marzo pasado, tras haber conseguido a fines del 2011 el ascenso a Primera en el país trasandino.

Pese al hermetismo con que se manejó la dirigencia del club, anoche se conoció que Perrone llegó a un acuerdo para tomar el cargo que dejó a principio de semana Sava, luego de sumar su quinta caída consecutiva. Perrone mantuvo ayer una reunión en nuestra provincia con la dirigencia del club y quedó concretada su asunción para el próximo lunes. Si bien hasta ayer por la tarde los dirigentes de San Martín remarcaban en el Hilario Sánchez que “todavía no hay nada definido”, la llegada del ex defensor de River, campeón mundial en 1986, ya estaba concretada.

Perrone comenzará desde hoy a interiorizarse del plantel, más allá de los conocimientos que tiene hasta el momento. La idea es que observe todos los videos del equipo en esta temporada para ver en detalle el material humano con que trabajará desde la otra semana, justo en la previa del clásico ante Godoy Cruz. Se trata de una coincidencia con el arribo de Sava, pues debutará frente al Tomba, como le pasó al Colorado con aquel 1-0 en su estreno en el Hilario Sánchez.

Perrone, quien es yerno de Carlos Timoteo Griguol, encajaba en el perfil de técnico que buscaba la Comisión Directiva sanjuanina por el hecho de su trayectoria. Su carrera como técnico tiene a clubes como Olmedo, Cuenca y Emelec, todos de Ecuador. Justamente a este último lo clasificó para la Copa Libertadores del 2010, aunque no lo dirigió en ese certamen. El año pasado tuvo una experiencia en el Rangers, de Chile, club que tomó en la segunda categoría y pudo lograrlo ascender a Primera. Claro que el arranque de su ciclo en este 2012 no fue el mejor y por eso decidió renunciar durante el Apertura.

Su carrera como futbolista lo tuvo en clubes como Ferro, Atlanta y el CD FAS, de El Salvador. La vida activa en las canchas se le terminó debido a una rotura de ligamentos cruzados, aunque se dio el gusto de integrar el River campeón mundial de la Intercontinental de 1986 bajo la dirección técnica de Héctor Veira. Ya fuera de las canchas y por su vínculo con Griguol, fue una década su ayudante de campo en el propio Millonario de Núñez, Real Betis (España), Ferro y Gimnasia de La Plata.

Desde el lunes tendrá la misión de encaminar el barco de San Martín, que actualmente está en zona de descenso. Una misión dura para la cual la dirigencia confió en él.