A dos semanas del comienzo de la pretemporada y a poco más de un mes del comienzo del torneo Clausura, Boca Juniors transita entre la carencia de ofertas por sus jugadores que están a la venta, las trabas económicas y el manejo de los tiempos de dirigencias vendedoras, y la incertidumbre en torno al estado físico de dos de los pilares del equipo al momento de comenzar la competencia.

La mira de la cúpula boquense con poder de decisión, es decir el trípode que conforman el presidente Jorge Amor Ameal, el manager Carlos Bianchi y el directivo Marcelo London, sigue puesta en el volante de Rosario Central Jesús Méndez, reclamado como esencial por el entrenador Alfio Basile.

Los dirigentes de Central insisten en reclamar 2,3 millones de dólares y un jugador que ellos y no Boca disponga, o bien 4 millones de dólares. Roberto Abbondanzieri, Cristian Chávez o Lucas Viatri son las alternativas de Central que no acepta Boca, aunque hay una luz sobre el guardavallas.

"Si Boca decide incluir al ‘Pato’ en una negociación con Central por Méndez, el ‘Pato’ lo analizará y verá qué se hace en consecuencia”, señaló el representante del arquero, Ricardo Schlieper, quien no obstante aclaró que no tiene información de que el club "xeneize’ quiera negociar a su pupilo.