Insiste. Lisandro López, capitán de Racing, busca el balón ante la presencia de un rival de Banfield. El actual campeón doméstico no pasó de la igualdad sin tantos.

Racing tenía la gran posibilidad de seguir prendido en la lucha por la primera colocación de la Superliga, pero Banfield fue un escollo muy duro para los dirigidos por Eduardo Coudet y en un partido de alto vuelo no se sacaron diferencias.

El primer tiempo fue de ida y vuelta, el Taladro generó peligro con un par de cabezazos de Julián Carranza, que fue la gran referencia en el área y ganó en todos los envíos.

Racing, por su parte, lastimó a los dirigidos por Julio César Falcioni con la profundidad en ataque de Iván Pillud, que con remates de media distancia y centros tuvo las más claras.

En el complemento el dominio de la Academia fue claro y tuvo numerosas situaciones de gol que convirtieron en una de las figuras del encuentro al arquero colombiano del conjunto del sur, que a través de las contras tuvo en los pies de Agustín Urzi la gran chance de abrir el marcador, pero el palo se lo negó.

El cero a cero que quedó estampado en el marcador del Cilindro de Avellaneda sabe a poco, porque ambos equipos merecieron anotar, al menos, un gol. Con este empate, el Taladro sigue complicado con los promedios y Racing se perdió la oportunidad de quedar segundo a un punto de Argentinos, el único líder de la Superliga.

El entrenador de Racing, Eduardo Coudet, analizó tras el empate que "siento que en la cancha sólo hubo un equipo que quiso ganar y otro que siempre intentó que no le anotaran un gol. Tuvimos chances claras como para marcar, pero a veces nos faltó tranquilidad en los metros finales de la cancha.

Obviamente que se perdió una chance importante de seguir de cerca a los punteros, pero todavía queda mucho camino y el torneo va dando distintas sorpresas".