Barrio Rivadavia debía recibir en su cancha a Petroleros, aunque las inclemencias del tiempo hicieron que no hubiera luz en su estadio y por eso el encuentro tuvo que jugarse en la cancha de Unión, donde empezó con una hora y media de demora. A pesar de esto los sanjuaninos se hicieron fuertes y pudieron revertir un partido que iniciaron perdiendo y que lo ganaron por 3-2, a falta de 2 segundos para el final, con un gol de Abel García. La serie es al mejor de tres partidos y el próximo juego será el viernes en Mendoza.
El inicio del juego le fue favorable a la visita, que manejó bien la bocha. Por su parte, Rivadavia, no logró entrar con un buen ritmo y lo pagó caro. Ya que a los 7′ una contra letal de Lucas Martínez puso las acciones 1-0, con una definición exquisita. Los minutos pasaban y Rivadavia no podía doblegar al arquero Grimalt que se agigantaba en cada acción. Pero sobre el final del primer tiempo llegó el gol del empate, a través de Serafini y así terminó ese primer parcial.
En el segundo tiempo, Rivadavia salió a buscar el triunfo y generó grandes ocasiones de gol: Primero con un potente remate de Serafini que fue desviado por el pie del arquero Grimalt y luego con un tiro de Gerardo Solano. Petroleros no se quedó atrás y su respuesta vino por medio de Lucas Martínez que estrelló un tiro en el pecho del arquero, Sebastián Ruiz. El partido era entretenido y los arqueros figuras. Sobre los 15′, Petroleros, salió de contra con Lucas Martínez, que disparó y puso arriba a su equipo 2-1. Los locales no sintieron el golpe y rápidamente llegaron al empate con una gran maniobra individual de Abel García, que con caño incluido venció a Grimalt y puso el 2-2. Pero esto no era todo porque a falta de 2 segundos para el final, nuevamente García remató y clavó el 3-2 definitivo.
En el final, la alegría, a pesar de la odisea, fue toda para Rivadavia, que nunca bajo los brazos y está arriba en la serie.

