Buenos Aires, 9 de mayo.- La curiosa imagen se dio en el partido que disputaban el Anzhi Makhachkala (donde juega el brasileño) y el Volga: a los 23 minutos del segundo tiempo, instantes después de que el equipo de Roberto Carlos se pusiera en ventaja (2-1), un hincha cruzó el campo y se acercó al lateral sudamericano.

Aunque en un principio se sorprendió, el ex jugador del Scratch trató a su fan con amabilidad, le firmó un autógrafo y le dio un abrazo. El remate de la anécdota es más colorido todavía: Roberto Carlos tuvo que perseguir al hincha para devolverle el bolígrafo. Entonces sí, el simpatizante se fue con una sonrisa y el brasileño aplaudió e instó a los hinchas presentes en el estadio a que se sumaran con las palmas.