Sabe que la empresa es difícil, pero no imposible, por ello la mayor parte del año se la pasó en Buenos Aires entrenando bajo la atenta mirada de Juan Ledesma, técnico de la campeona mundial minimosca AMB (Asociación Mundial de Boxeo), Yesica Bopp.

En el gimnasio del CEDEM N° 2 de Caseros, la sanjuanina Cecilia Román (9-4-1) preparó su físico para llegar en el óptimo estado que la cita requiere, porque mañana en el Salón Tattersall del Hipódromo de San Isidro; intentará coronarse campeona mundial en el peso gallo de la FIB (Federación Internacional de Boxeo) cuando enfrente en la pelea estelar a la bonaerense Carolina Duer (19-3-1, 6KO), monarca de la división.

Lejos de sus hijos y en la soledad de una pensión, ubicada a ocho cuadras del lugar donde entrena, Cecilia, acuna sus sueños. ’Sinceramente, no esperaba que se me diera tan rápido la chance de pelear por el título mundial. Estaba preparando mi primera defensa del cinturón argentino y como en mi categoría, hay boxeadoras con cinco o seis peleas que no están habilitadas por el reglamento de la FAB (Federación Argentina de Boxeo) para ser retadoras, no me quedaban muchas opciones. Así que acepté’, contó quien desde el 10 de septiembre del año pasado es monarca nacional de los 53,524 kilogramos (118 libras).

’Ya estoy en peso, así que no debo privarme en las comidas’, expresó, Cecilia, cuyo día en Buenos Aires empieza muy temprano. ’Me levantó a las 6,30 y desayuno. Dos horas después, con el profesor Ricardo Meloni realizó los entrenamientos específicos de intensidad, potencia y velocidad. A las 10,30 vuelvo a la pensión, me preparo el almuerzo y como a las 12, porque a las 14 debo estar en el gimnasio haciendo toda la tarea de técnica de combate’, explicó.

Hace un par de semanas el entrenamiento incluía tres esfuerzos. A los dos habituales se agregó una tarea de sofocación (’fue por diez días y lo empezábamos a las 19’), lo que le permitirá llegar a la pelea con el suficiente aire que requieren los diez asaltos. ‘Al principio, sentía mucho la diferencia con el entrenamiento que hacía en San Juan, hubo días en los que terminaba exhausta y me dolía todo el cuerpo’, comentó.

La mayor experiencia y el oficio de su rival es un tema que Román respeta pero sabe que cuando suene la campana y les saquen hasta el banquito, deberá tratar de imponer condiciones si quiere coronarse campeona. 
Consultada sobre el plan que preparó con su entrenador, Cecilia no escondió nada: ’saldré a tirar de entrada porque soy visitante y tengo que ganar con claridad para que me den la pelea a los puntos’.

Admite que lo que más le costó en este medio año que ha completado entrenando en Buenos Aires fue coordinar y aprehender los movimientos de traslación. ’Con Ledesma hicimos hincapié en corregir posturas para el lanzamiento de la manos y en los desplazamientos. Me costó mucho, pero como sé que con la repetición se afirman los movimientos, sin darme cuenta estaba en mi casa haciendo la cena y me movía dando los pasos laterales que había ensayado’, concluyó con una sonrisa que denota su alegría por la chance.



La FIB oficializó a las dos en su convención

La oportunidad de pelear por la corona mundial le llegó más rápido de lo pensado a Cecilia Román, como ella refirió en la charla con DIARIO DE CUYO.

En la convención de la Federación Internacional de Boxeo, realizada el pasado mayo en San Petesburgo, Florida, Estados Unidos, a la sanjuanina la ubicaron como número 1 del ránking de las 118 libras.

En esa reunión donde se convocaron autoridades y boxeadores de la FIB, en la que designaron boxeadora del año a, la también sanjuanina, Leonela Yúdica, campeona mundial de peso mosca; también se designó campeona regular a la bonaerense Duer, quien desde el 26 de agosto del año pasado, cuando noqueó en el séptimo round a la brasileña Aline de Cassia Scaranello, era campeona interina.

El retiro de la chilena Carolina Rodríguez, quien era campeona, por un problema renal, permitió que a Duer se la eleve a la condición de monarca absoluta.