El partido entre San Lorenzo y All Boys, que se debía jugar el domingo a las 16, en el Nuevo Gasómetro, fue postergado por la agresión que sufrió el miércoles, el defensor Jonathan Bottinelli a manos de un grupo de barrabravas tras la práctica del equipo de Boedo. El cotejo, válido por la 13ra. fecha del torneo Apertura, se suspendió por la existencia de una causa judicial tras los hechos y todavía no tiene fecha concreta de realización.
La AFA, según su secretario, Miguel Silva, ya recibió la notificación del Comité de Seguridad para reprogramar el encuentro. “Hoy recibimos la notificación en la que fuimos informados que el partido entre San Lorenzo y All Boys no se juega y acataremos la decisión”, informó Silva. El secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados, Sergio Marchi, se reunió por la mañana con Juan Carlos Blanco, en representación del Ministerio de Seguridad que dirige Nilda Garré, para manifestarle su “preocupación y pedir ayuda para afrontar esta situación”. Él fue quien llevó la idea de la reprogramación del encuentro para analizar detenidamente lo sucedido, resaltó sobre la situación que le tocó vivir a Bottinelli que “hay una cadena de responsabilidades que no se pueden obviar”.
Bottinelli fue agredido por tres integrantes de la barra brava, que irrumpieron en la práctica a puertas cerradas.
Según relataron a Télam testigos del hecho, el episodio ocurrió cuando un grupo de barras irrumpió en la práctica para reclamar al plantel por los malos resultados en el torneo Apertura ya que está muy comprometido con los promedios para el descenso. Asad y Bottinelli, junto con Pablo Migliore y Cristian Tula, conversaban con los barras. Sin embargo, entre reproches y reacciones, el encuentro fue subiendo de tono hasta que los barras golpearon a Bottinelli.
