Cuando no tiene que ser, no es. San Martín, que después de 16 fechas ya no es líder, mostró por primera vez este año grandes dosis de la versión que lo llevó a ser el equipo récord en el primer semestre. Pero cuando parecía que estaba para ganarlo, en el segundo minuto adicionado Iuvalé metió un zurdazo letal que decretó el 3-2 para los jujeños. Así, el equipo de Hrabina sumó su tercera caída del año y como Instituto ganó, ahora el Verdinegro es escolta de La Gloria. La revancha puede llegar en la próxima fecha, el lunes 22 a las 21.10, cuando choque ante el tercero de la tabla: Olimpo.

Con el pitazo de Castro, además del partido, comenzó la lluvia, un ingrediente clave para que el partido fuera a un gran ritmo. En ese sentido fue el local el que mejor se acomodó y entendió la clave del juego: buscar el juego aéreo. Así mostró falencias inéditas en la zaga central del Verdinegro. A los 11′ fue el primer índice que algo no andaba en la azotea sanjuanina. Un córner discutido por todo San Martín (bien cobrado por el árbitro porque el remate de Arraya se desvió en Sánchez) derivó en el frentazo cruzado de Arraya para el 1-0. Golpe difícil de asimilar. Pero desde entonces, el equipo de Hrabina mostró su mejor cara. Se paró quince metros más adelante y aunque no generó riesgo impuso su ritmo. El empate y el final de la sequía que llegó a 289′ sin goles lo estableció Guillermo Pereyra tras un derechazo que se le escapó de las manos a Di Giorgi. El local se aturdió con la igualdad. Pero no duró mucho en ese trance porque a los 23′ y nuevamente por la vía aérea llegó el segundo de los de Arzubialde: Otro córner al área sanjuanina y Pomba metió el derechazo cruzado, desde el mismo lugar que Arraya abrió el marcador, dio rebote Pocrnjic como pudo y nadie cerró en el rebote a Fernández Francou que puso el segundo. Más allá de la desventaja, igual San Martín fue y fue. Torresi demostró lo importante que es para el equipo y manejó el balón. Al mendocino le faltó una compañía y por eso no hubo más peligro para Di Giorgi, salvo por un tiro libre de Sánchez que despejó al córner el uno jujeño.

En desventaja en el marcador, San Martín lo buscó por todos lados. Sin muchas ideas pero demostrando esa chapa de candidato a pelear por un ascenso. "Nacho" González casi se saca un pleno con un zurdazo, pero salió cerca. Quique movió el banco e ingresó el pibe Narváez, que mostró toda su categoría pues jamás se asustó por semejante marco. Justamente una volea del nacido en el Médano de Oro derivó en el toque de Penco para el 2-2. Estaba bien, pero también la sensación que podía ser victoria visitante. Hasta que llegó el desborde de Castillo y el zurdazo letal de Iuvalé. Derrota y adiós a la punta. En seis días hay que empezar de nuevo ante el aurinegro.