Con sólo decir el “Motoneta” los hinchas verdinegros ya saben de quién se trata. Los mismos que nunca podrán borrar de su retina el gol que le marcó a Gimnasia, en La Plata, el 30 de junio de 2011 que le dio el ascenso a San Martín a Primera División. Ayer, y tras 4 años jugando en San Martín, Sebastián Ariel Penco le puso fin a su exitoso ciclo, en el que convirtió 46 goles para ser el segundo máximo artillero en la historia del club (Pablo Marini tiene 66), y se marchó a Independiente de Avellaneda luego de una negociación que se estiró por más de 10 días y que le dejará al club $1.200.000.

De esta manera, lo que era la mayor novela de la B Nacional tuvo su fin. Penco, quien llegó a Concepción en el 2009, saboreó las mieles de la gloria con sus goles vitales y por ello en su momento San Martín le compró la mitad del pase y era duelo de sus derechos hasta mediados del 2015. No obstante, en la pasada temporada el delantero fue perdiendo continuidad. También se lo tildó de ser un jugador problemático dentro del vestuario, y todo eso fue suficiente para que cuando el Rojo mostró interés inmediatamente dijo: “Mi ciclo en San Martín estaba terminado”. Incluso pidió una licencia para no hacer la pretemporada hasta que no se destrabara su situación.

La misma que llegó a su fin ayer, cuando tras varios días de diálogo entre los dirigentes de ambas entidades en los que ya se habían puesto de acuerdo en el monto del pase pero faltaban los avales sobre el pago de Independiente, ayer aparecieron y sobre las 17 el “Motoneta” tomó el vuelo rumbo a Buenos Aires para sumarse al plantel de Brindisi.

“Gracias a Dios se destrabó. Estoy muy entusiasmado y contento. Con Brindisi hablé dos o tres veces. Yo me moría de ganas de estar con el plantel. Creo que estoy en el momento ideal para este paso”, le contó ayer SP9 a una radio partidaria del Rojo.

Llegar a Independiente se había transformado en una obsesión para Sebastián, que desechó otras dos propuestas, porque consideró que era la gran oportunidad de llegar a un equipo grande pese a haber descendido a la B Nacional al igual que San Martín. “Todos saben que Independiente es un grande de verdad e influye mucho vestir la camiseta. No importa en la categoría que esté”, tiró el último gran goleador que tuvo el Verdinegro.