Johannesburgo , 6 de junio.- Miles de fanáticos provocaron el domingo una estampida a las afueras de un estadio antes de un partido de fogueo para el Mundial entre Nigeria y Corea del Norte y 10 personas resultaron heridas.

Algunas personas fueron pisoteadas por la multitud, entre la que había muchos vestidos con camisetas de la selección de Nigeria. El estadio Makhulong en las afueras de Johannesburgo tiene capacidad para unas 12.000 personas.

"Diez personas, entre ellas un policía, resultaron levemente heridas y nadie murió", dijo el vocero de la policía, Hangwani Mulaudzi. "Este es un partido amistoso y creo que los fanáticos estaban emocionados de venir y ver a sus héroes que jugarán en el Mundial".

Mulaudzi indicó que porque se trataba de un amistoso, la selección nigeriana, que fungió como anfitriona, era responsable de la seguridad. Dijo que cuando empezaron los problemas la policía intervino para controlar la situación.

Un fanático, vestido con una camiseta sudafricana de rugby y sangrando de la cabeza, indicó que no pudo contra la muchedumbre.

"El público simplemente me superó y me caí", comentó Japhta Mombelo, quien sangraba de la cabeza. "Me caí y la gente me cayó encima".

"Esa multitud te domina. La policía me dijo que me quede y que buscarán una ambulancia pero sigo esperando".

La primera oleada de gente se produjo cuando se abrieron los portones del estadio. Poco después la policía cerró los portones pero cuando fueron reabiertos hubo otra oleada, y más personas se cayeron y fueron pisoteadas.

"Estábamos entrando y la gente nos pisaba", relató Princess Mbali, quien vestía una camiseta verde de Sudáfrica. "Pensé que moriría. Yo estaba abajo".

Poco después de la segunda oleada los portones fueron cerrados de nuevo y la mayoría de la multitud se disipó.

"La policía no dice nada, sólo que vayamos a ver el partido", señaló Mbali. "¿Cómo podemos ver el partido cuando estamos heridos? Quizás tengo las costillas rotas. Nadie nos ayuda y somos sudafricanos".

El estadio Tembisa no se parece en nada a los que fueron construidos o renovados para el Mundial. Tiene gradas de cemento y está rodeado por una reja sin portones.

Las selecciones de Nigeria y Corea del Norte estaban formándose para escuchar los himnos cuando ocurrió la segunda oleada. Los jugadores no tenían idea de lo que sucedía afuera.

Este tipo de incidente no es raro en el fútbol africano. El año pasado, la FIFA multó a la federación marfileña 46.800 dólares después que 22 personas murieron en una estampida en un partido por las eliminatorias africanas.

No había seguridad mundialista en el estadio por tratarse de un amistoso.

"La FIFA regaló las entradas y ahora vean", comentó el policía que rehusó ser identificado porque no estaba autorizado a hablar con la prensa. "La FIFA quería que fueran gratis".

La FIFA dijo que no tuvo nada que ver con la organización del partido.