Tanto en la vida como detrás de la redonda, la revancha y esa oportunidad siempre llega. Detrás de un dolor, siempre viene la cura para sonreír. Perder y después ganar, manda. Y en el fútbol ese momento está latente para Lisandro Beratz. El marcador central viene de no poder ascender la temporada pasada con Santamarina de Tandil cuando perdió la Promoción ante la CAI. Ayer, la revancha le sentó de la mejor manera y con un plus. Anotó el tanto del triunfo, el primero en Desamparados y encima tuvo un desempeño bárbaro para ser el pilar del triunfo sobre San Martín por 1-0.
El martes, en la previa al partido, le confesó a DIARIO DE CUYO que “en lo personal es una revancha y quiero concretar lo que se me negó el año pasado”. Y ese dulce sabor tuvo final feliz para el bahiense. En aquella Promoción ante la CAI también estaban Ariel Barth y Gerardo Corvalán, pero a diferencia de Lisandro ninguno lo tomó como cuenta pendiente en lo personal. Por ello la dimensión del logro del espigado defensor puyutano.
“Estoy muy feliz, buscamos ganarlo en nuestra cancha y se consiguió. Tuvimos presencia, hombría y nunca nos llevaron por delante y superamos a un equipo grande”, argumentó tras el triunfo.
Pero en su rostro, que muy pocas veces resulta expresivo, había una enorme sonrisa. El gol formó parte de ello. “Se hizo esperar pero llegó en el partido más esperado. Es el primero en Desamparados y el primero de mi carrera con zurda. Lo venía buscando y llegó en un momento muy importante para el grupo”, confesó.
Luego, tuvo su análisis de lo que viene, sabiendo que con un empate el domingo en Tucumán el ascenso se habrá consumado. “La diferencia del 1-0 es importante porque es la misma que las de las anteriores definiciones. Ahora ellos tendrán la presión y nosotros seguir haciendo nuestro trabajo, ese que nos puso en esta instancia”.
El domingo puede ser el gran día y Lisandro Beratz sabe que ayer dieron un paso importante para lograrlo. “Estamos cerca y es lo que esperamos, sólo falta lo más importante, quedan 90 minutos y vamos a Tucumán por el ascenso”, cerró Lisandro, quien ayer tuvo ese dulce sabor de la revancha, que lo dejó cerca del objetivo.
Su dulce sabor de revancha
El marcador central viene de no poder ascender la temporada pasada con Santamarina de Tandil. Ayer, la revancha le sentó de la mejor manera y con un plus.

