La plaza vacía, sin hinchas de Unión. Sólo los efectivos policiales que en moto merodearon la manzana previniendo una posible convocatoria. Sorprendente, llamativo e inesperado. Se escuchaba el sonido de autos y los obreros que trabajaban remodelando la plaza.
Cuando corrían aproximadamente 35 minutos del segundo tiempo se escucharon a los lejos el sonido de algunas bombas de estruendo. La mayoría de los hinchas viajaron a Córdoba, ¿Y los demás? seguramente cada uno en su hogar con amigos, otros quizá cumpliendo horas laborales.
"Jaja jaja, no ascendieron", fue el único grito que se escuchó toda la tarde. Un hombre que iba pasando con un azadón al hombro le gritó al dueño de una bicicletería.
Tampoco en el estadio 12 de Octubre hubo presencia Azul. La cancha abrió las puertas para que todo los hinchas fueran a escuchar el partido, nadie pisó el estadio. Tarde despoblada.