Los dos ciclistas argentinos que están disputando la clásica italiana Settimana Internacionale Coppi & Bartale, el sanjuanino Nicolás Tivani (Treviggiani-Phonix Hemus 1896) y el chubutense Eduardo Sepúlveda (Movistar Team) lograron culminar ayer la dura segunda etapa de la prueba que tiene consideración 2.1 para la UCI (Unión Ciclista Internacional).

El duro parcial de 130 kilómetros que culminó con un circuito "rompepiernas" que incluyó tres ascensos al Rubicone, un puerto de altura con una media del 5,4 Bauke Mollema (Trek Segafredo). El pedalista que ganó la edición 2017 de la Vuelta a San Juan fue el más ágil y fuerte de siete hombres que le sacaron 33 segundos al pelotón. Mollema cruzó la meta con 2 segundos e ventaja sobre el italiano Diego Rosa (Team Sky), quien, apoyado en la victoria que tuvo su formación en la contrarreloj por equipos que incluyó la sub-etapa de apertura corrida anteayer, es el nuevo líder de la clasificación general de la prueba.

Media docena de pedalistas fueron quienes conformaron la denominada "fuga del día": el francés Brice Feillu (Fortuneo-Samsic), el polaco Patryk Stosz (CCC Sprandi Polkowice), el estadounidense Tyler Williams (Israel Academy), el holandés Marco Minnaard (Wanty Groupe Gobert), el belga Sebastien Delfosse (WB Aqua Protect Varanclssic) y el australiano Calvin Watson (Aqua Blue Sport), quienes llegaron a tener más de tres minutos sobre el pelotón.

Faltando 30 kilómetros el grupo grande comandando por los equipos más fuertes, el Sky y el Trek Segafredo apretó el ritmo y en cuestión de minutos logró cazar a los seis fugados. El acople se produjo mientras transitaban el último de los tres giros al circuito en la ciudad de Sogliano.

Consumada la neutralización fue el ecuatoriano Richard Carapaz (Movistar Team) quien encabezó un ataque en el que quedó cortado con Mollema, Rosa y el italiano Giulio Ciccone (Bardiani CFS), el francés Guillaume Martin (Wanty Groupe-Gobert), el colombiano Ivan Ramiro Sosa (Androni-Sidermec) y el holandés Koen Bouwman (Team Lotto NL Jumbo).

La fortaleza, experiencia y agilidad de Mollema fue clave para aprovechar la "bajada" del Rubicone y ganar el parcial.

Hoy se disputará la tercera etapa por caminos de la ciudad de Crevalcore. Serán 171 kilómetros sobre terreno llano, con final en un circuito citadino al que se darán 10 giros.