La Unión Europea de Fútbol Asociado (UEFA) rechazó ayer la denuncia de Real Madrid por "reiterada conducta antideportiva" de jugadores de Barcelona, aunque el club merengue anunció que apelará la resolución e insistió con nuevas denuncias.

El Comité Disciplinario de la UEFA rechazó el pedido de sanciones contra Daniel Alves, Sergio Busquets y Pedro, en el partido semifinal de la Liga de Campeones, que el equipo catalán ganó en el Santiago Bernabéu por 2-0.

El club madrileño argumentó que los jugadores azulgrana "simularon agresiones de forma persistente con el único fin de inducir a error al árbitro, lo que degeneró en la decisión manifiestamente injusta de expulsar a Pepe (Real Madrid)".

Por otra parte, el técnico del equipo "Merengue", el portugués José Mourinho, que fue suspendido a su vez porque también fue expulsado en el Bernabéu, no podrá comunicarse de ninguna manera, en la revancha de esta tarde en el Camp Nou, con los jugadores ni el cuerpo técnico durante el partido y sólo podrá acceder quince minutos al vestuario cuando termine el partido, según las normas de la UEFA.