Los grandes equipos tienen un rendimiento promedio por encima de la media. Y otra característica de estas formaciones es que cuando mayor es la exigencia del rival de turno, mejor es la labor. UPCN Voley encuadra, sin dudas, en esta categoría y anoche lo volvió a demostrar ante lo que era el puntero e invicto de esta Liga Argentina. Los Cóndores, que buscan su tricampeonato en esta edición, no le dieron ninguna chance a un Sarmiento que pareció poquito frente al poderío de los dirigidos por Fabián Armoa. El 3-0 (25-19, 25-23 y 25-20) resume las diferencias entre un equipo consolidado y que a esta altura juega de memoria, con otro que está en proceso de formación pero que todavía tiene mucho camino por recorrer cuando se topa ante un adversario de estos kilates. Por eso, luego de ver los dos primeros juegos de UCPN en esta campaña (ganó ambos sin ceder un set) la sensación es clara: al gremial van a tener que sacarle la corona con mucho esfuerzo.

El arranque del partido fue el único momento donde las fuerzas resultaron iguales. Sarmiento arriesgó siempre con el saque y eso provocó algunas falencias en la recepción local. Pero con el transcurrir de los puntos, UPCN empezó a encontrarle la vuelta al bloqueo rival y defendió algunas pelotas claves para luego facturar mediante el contraataque. Así, supo liquidarlo con un claro 25-19.

No cambió mucho el trámite el encuentro en el segundo set. Todo a pedir de UPCN, con Guerra haciendo estragos por la punta y teniendo un cada vez más sólido Olteanu, tanto en recepción como ataque. Pese a ello, el parcial fue palo y palo hasta el final, pero la falta de contundencia de Sarmiento le pasó factura e hipotecó su invicto con un 25-23 para los sanjuaninos.

UPCN olfateó sangre en su rival y no lo dejó vivir en el último set. De movida se escapó en el score y a toda orquesta supo cerrar el encuentro. Con Bengolea sólido en ataque y teniendo en Ramos a una garantía en los primeros tiempos. Un 25-20 para sonreír y esperar mañana a La Unión.