Es el clásico del vóleibol nacional, el que conoce de épicas batallas jugadas ante multitudes, como aquella recordada final en el Cantoni con casi 10 mil personas en 2011. UPCN y Bolívar, en el duelo que parece inoxidable, abrirán desde esta noche la serie de su sexta final de Liga Argentina de Clubes de vóleibol, la cuarta consecutiva. El primer partido de un cruce al mejor de cinco se llevará a cabo esta noche, desde las 21 y en el estadio República de Venezuela, con televisación de TyC Sports.

Bolívar defiende el título y aspira a ganar su octavo campeonato, mientras que UPCN va por la revancha y pretende alcanzar su séptima corona. Los dos grandes del vóleibol argentino protagonizan ininterrumpidamente la final de Liga desde la temporada 2014/15, con dos vueltas olímpicas para los sanjuaninos y la última para el Celeste.

Este año, los dos equipos afrontaron adversidades. UPCN debió renovar parte de su plantel por los alejamientos de Nikolay Uchikov, Javier Filardi y Pedrao; mientras que Bolívar sufrió la lesión de tres armadores (Demián González, Germán Galdón y el belga Frank Depestele). Sin embargo, pese a sus vaivenes en la fase regular, en Play Off demostraron su vigencia y dejaron en el camino a otros aspirantes.

Los sanjuaninos quedaron segundos en fase regular y en cuartos de final eliminaron a Libertad Burgi (3-0), para luego dejar en el camino a Lomas Voley (3-1). Bolívar fue el líder de la rueda clasificatoria, mientras que en Play Off avanzó sobre Monteros Voley (3-1) y Ciudad Voley (3-1).

"No hay análisis previo. Es otra vez con Bolívar, por cuarta final consecutiva. Nos conocemos bien, nos vemos las caras siempre y acá no importa cómo llegue uno u otro, si hubo un lesionado o si uno se fue. Es UPCN-Bolívar y no importa nada más, ni siquiera quién juegue", apuntó el DT de UPCN, Fabián Armoa.

"No deja de ser una final, con un pronóstico aparte. El año pasado estábamos un poquito mejor nosotros; los otros dos años, UPCN. Pero fuimos siempre al quinto partido. Se juega con el 95% de actitud y emociones, y creo que eso se va a ver en la cancha. Ellos vienen con otro rodaje porque no tuvieron las bajas que tuvimos nosotros, pero eso no lo meto como excusa", dijo el central de Bolívar, Pablo Crer.

Cara a cara por el título

Liga 2009/10

UPCN, en su tercer año de vida, llegó por primera vez a la final de la Liga y enfrentó a un poderoso Drean Bolívar, que por entonces venía de tres títulos consecutivos y jugaba su cuarta final al hilo. Los sanjuaninos entonces no pudieron con el equipo de Tinelli y en aquella serie cayeron 4 a 1. El premio: ser el equipo con mayor convocatoria en la Liga Argentina.

Liga 2010/11

Los sanjuaninos fueron por revancha y a tratar de cortar el dominio de Bolívar, que tenía seis títulos, los últimos cuatro de manera consecutiva. Tras perder los dos primeros juegos en San Juan, empató la serie en Bolívar. Finalmente, llegaron al séptimo choque (fue la última vez que la final se jugó al mejor de 7 partidos) y en un Cantoni totalmente colmado, UPCN ganó su primer campeonato.

Liga 2014/15

UPCN logró su quinto título consecutivo en una final que volvió a encontrar a cóndores y celestes después de cuatro años. Para entonces, la serie decisiva se jugaba al mejor de cinco encuentros y nuevamente se definió en el último. UPCN, apoyado nuevamente por miles de personas en el Cantoni, logró algo inédito: nunca antes un club había ganado cinco Ligas en forma consecutiva.

Liga 2015/16

El último título de UPCN. El hexacampeonato fue alcanzado en una final ante el clásico rival que nuevamente se definió en el quinto juego. La serie fue 3-2 para UPCN, que nuevamente hizo historia al alcanzar las seis conquistas en línea. Fue una Liga increíble de UPCN, que sólo perdió tres encuentros en todo el torneo y ninguno en su casa, lo que dejó en evidencia fue un campeón.

Liga 2016/18

UPCN se quedó con el subcampeonato y quien se transformó en heptacampeón de la Liga fue Bolívar, tras cerrar la serie 3-2 en su estadio. UPCN no pudo estirar su histórica marca de 6 campeonatos consecutivos, pero ratificó su poderío al jugar su octava final al hilo. A su vez, los bonaerenses se metieron en la historia pues con su séptima conquista quebraron la paridad con los sanjuaninos.