El automovilista sanjuanino Ulises Campillay encontró su casa desvalijada al regresar de Paraná, donde sufrió un terrible accidente en su debut en Top Race, pero lejos de bajonearse por el robo, dijo que se encuentra enfocado en su recuperación para volver cuanto antes a las pistas. De hecho, este sábado fue operado con éxito de la clavícula derecha y ya se encuentra en su casa.
El joven Ulises Campillay, de 19 años, vive con su familia en un barrio privado de Rivadavia que recién se está poblando. No cuenta con vigilancia permanente. Según su versión, salieron de la casa el jueves de la semana pasada rumbo a Paraná, donde tuvo su debut en el Top Race, que no fue satisfactorio. Es que cuando se disputaban las primeras vueltas de la final de la décima fecha en el Autódromo Ciudad de Paraná, el Chevrolet Cruze TR V6 de Ulises levantó vuelo y empezó una serie de diez tumbos.
La carrocería del auto quedó desintegrada y la estructura tubular junto a las protecciones que rodean la butaca fueron claves para que el tema no pase a mayores. El piloto fue asistido, sufrió unos golpes y fue hospitalizado.
Luego de padecer todo eso, la familia regresó a la provincia el último miércoles. Esa noche se encontraron con la ingrata sorpresa del ataque a su vivienda.
"Ariel Persia me fue a buscar al aeropuerto porque yo me fui en camioneta a Paraná con mis padres y la familia de Juan Cruz Roca y Persia me ayudaron para traer la camioneta. Cuando estábamos volviendo a mi casa, llegamos y estaba todo desvalijado", delcaró el piloto a Carburando. Y en diálogo con este diario agregó que los ladrones ingresaron tras violentar un ventanal de uno de los laterales de la casa y que sustrajeron aparatos y ropa suya. Aseguró que dinero no se llevaron porque no había y reveló que la alarma al parecer falló.

Pese a lo traumático y angustiante, Ulises explicó que él y su familia están "tranquilos", y que ahora su foco está puesto en recuperarse a pleno de las lesiones que sufrió en el vuelco. Al respecto, a primera hora de este sábado fue intervenido quirúrgicamente en una clínica privada. La cirugía fue para recomponer su clavícula derecha, fracturada en el accidente. También presenta leves fisuras en la cadera y el omóplato, que curarán con el tiempo.
Lo satisfactorio es que ya se encuentra en su domicilio, en reposo y confiado en que la mejoría será rápida.
EL ACCIDENTE
Se disputaban las primeras vueltas de la final de la décima fecha del Top Race en el Autódromo Ciudad de Paraná, cuando el Chevrolet Cruze TR V6 de Ulises Campillay, levantó vuelo y empezó su vuelco interminable. La carrocería del auto quedó desintegrada y la estructura tubular junto a las protecciones que rodean la butaca fueron claves para que el tema no pase a mayores. El piloto fue asistido, sufrió unos golpes y fue hospitalizado.
En el reinicio luego del primer ingreso del auto de seguridad, al llegar a la segunda curva Tomás Cingolani (Lexus TR V6) entró cruzado y lo tocó a “Josito” Di Palma (Cronos TR V6), que de forma involuntaria lo tocó a Campillay, cuyo auto desacomodado tocó el piano (reductores de velocidad que están en las curvas) que sirvió de trampolín.
Ahí el coche de Campillay comenzó una serie de diez tumbos y al caer el auto quedó destruido, pero fue clave la estructura tubular para preservar la integridad del corredor. Se trata de una jaula antivuelco que tienen todos los autos de carrera, pero en el caso del Top Race resistió de tal manera pese a la rotura total de la carrocería. Esto permitió que el sector de la butaca pudiera resguardar al competidor, más allá de los golpes que recibió. Esto De inmediato la competencia fue neutralizada y otra vez entró el auto de seguridad.
Una vez que Ulises fue asistido por el cuerpo médico, lo retiraron en una ambulancia que se lo llevó al centro médico del circuito entrerriano. “Ulises está bien. Está lúcido, compensado, está en perfectas condiciones hemodinámicas. Recibió un traumatismo de clavícula y del miembro superior derecho. Aparentemente no reviste gravedad, pero de todas maneras lo vamos a trasladar para descartar cualquier otra lesión”, indicó aquella vez la doctora de la categoría Soledad Costabel en la transmisión televisiva de Carburando.
Juan José Monteagudo, jefe del equipo JM Motorsport, que asisten el coche de Campillay, afirmó que “el 80 por ciento del auto quedó destruido. Solo rescatamos el solo motor, caja y diferencial. Pero lo más importante es que Ulises está bien gracias a la célula de seguridad del coche”.

