Los restos del ex jugador Francisco Varallo, último sobreviviente de la final del campeonato mundial de 1930 y legendario goleador de Boca Juniors, y quien falleció el lunes a los 100 años, fueron inhumados ayer en la bóveda familiar ubicada en el Cementerio Municipal de La Plata.
El presidente de la AFA, Julio Grondona; el intendente platense, Pablo Bruera; el presidente de Gimnasia y Esgrima La Plata, Walter Gisande y Rubén Filippas, de titular de Estudiantes, fueron algunas de las tantas personalidades que desfilaron por la sala velatoria para despedir los restos de Varallo. En la sala Ceferino se hicieron presentes, además, ex jugadores como Antonio Rosl y Ricardo Rezza; el ex presidente de Estudiantes, Raúl Correbo; el ex árbitro Jorge Vigliano y Víctor Manuel Azar, ex comentarista de Bernadino Veiga.
En tanto, en la mañana se acercó el presidente de Boca Juniors, Jorge Amor Ameal y los jugadores Sebastián Battaglia y Martín Palermo.
Durante la tarde del lunes llegaron a la sala velatoria -ubicada en calle 57 entre 5 y 6 de La Plata- varias ofrendas florales, entre ellas las de Boca Juniors, Gimnasia y Esgrima La Plata y Vélez Sarsfield, clubes en los que jugó Varallo.