Pasó otra Vuelta. Ya van 32 ediciones y con sus vaivenes, siempre deja algo para la historia. En esta oportunidad entronizó a un joven ciclista que, por los logros conseguidos en los dos últimos años, ha demostrado ser el más completo del país. Laureano Rosas inscribió su nombre entre los ganadores de la carrera del pueblo.
En esta ocasión la carrera tuvo escasos detalles organizativos para mejorar, como el hecho de pegar dos etapas duras, la de San Expedito y la del Colorado, sin darles, al menos, un día de descanso a los ciclistas. Otro aspecto que puede o no considerarse es si el parcial al santuario ubicado en Bermejo no debería hacerse, como la etapa reina, en horario matutino.
Fue una Vuelta distinta desde lo competitivo, en esta ocasión se atomizó a los equipos más grandes del orden local y de los que llegaron de afuera, salvo el Ironage Colner (Continental brasileño) el resto no mostró un nivel acorde con una prueba de tanta historia.
Después de un parcial de apertura equilibrado con llegada masiva y 116, de los 146, hombres que largaron en la diferencia de 15 segundos, la carrera comenzó a definirse en la segunda etapa. En ese esfuerzo de 149 kilómetros desarrollado en Pocito se produjo una fuga de diez hombres que llegó con 1m35s de ventaja sobre el pelotón. Y analizando los nombres de quienes quedaron arriba era sencillo darse cuenta que entre ellos estaría el ganador de la general final.
Había, al menos, un ciclista de un equipo fuerte: Naranjo (Rawson), Escuela y Richeze (Pocito), Dotti (Agrupación Virgen de Fátima) y Rosas (SEP). Muchos pensaron que había sido un error consolidar una escapada donde fuera Dotti, porque era potenciar sus chances en la altura. Pocos contaban con que, tanto Escuela como Rosas, estaban muy fuertes y para el de Bolivar sería muy difícil “colgarlos” en la montaña.
En la altura del Colorado (2672 msnm) ganó Daniel Zamora, quien se “soltó” faltando muy poco intentando ayudar a Dotti a cumplir el cometido de escaparse de sus rivales directos.
Escuela ganó el sexto parcial y estiró su ventaja de 32 a 42 segundos sobre Rosas. Pero esa renta no le alcanzó para mantener la camiseta porque el joven ciclista nacido el 23 de agosto de 1990 en Las Flores ganó la crono y lo superó por 48 segundos.
Quedaban dos etapas y varias bonificaciones, Escuela no se entregó nunca y ganó el último parcial, pero Rosas que lo escoltó allí, le había dado el golpe de gracia en el penúltimo esfuerzo, cuando lo derrotó embalando.