Si no hubo más abrazos tras el último pitazo del árbitro Giannini fue por los casi 40 grados de sensación térmica y los agobiante 50% de humedad que hubo ayer en Vicente López. Los propios jugadores de San Martín, tal cual reconocieron post primer encuentro de este año, entendieron que el 1-1 final ante Platense fue negocio, más allá que Unión acortó en dos puntos la diferencia y ahora se encuentra a cinco unidades. Es que la clave para llegar al objetivo de ascender estará en los partidos en Concepción y justamente eso es lo que ocurrirá el jueves cuando reciba a Belgrano tratando de estirar el invicto de 11 partidos que suma el Verdinegro, que sigue cómodamente arriba en las posiciones.

Largó con todo Platense en la inicial, mientras que San Martín decidió ver qué pasaba en los famosos primeros quince minutos de estudio. Torresi y Becerra estuvieron demasiado contenidos y así generar riesgo al arco de Sánchez se complicó demasiado. Encima, la velocidad de Nadaya fue un problema sin solución en toda esa parte inicial. El nueve tiró un centro a los 5′ que por poco no empuja el poco recordado en San Juan Diego Ceballos. El mismo Nadaya metió un derechazo de riesgo dos minutos después y justo cerró con su pierna Sánchez. Fue un comienzo con sustos para el líder. Pero una vez que ese envión del local se pasó, apareció la paciencia del equipo de Hrabina. Aunque justo cuando el trámite era monótono debido al calor y la humedad que había, volvió a entrar en acción la pesadilla llamada Nadaya. A los 33′ un pase preciso del Gringo Robert lo dejó en primer plano con Pocrnjic, a quien superó con un toque sutil para el 1-0. Desde entonces apareció la cara más conocida del Verdinegro. Esa en la que impone su ritmo y las condiciones de juego. Chucho Becerra hizo pesar su dribling por izquierda y justamente en una jugada que inició el cordobés derivó el empate. Tras una asistencia del diez, Damiani mandó el centro pasado para Cuevas, quien metió el derechazo. Sánchez la rechazó para el medio y Penco puso el testazo para el empate y cortarle un invicto al uno Calamar de 489 minutos. Claro que antes de irse al descanso hubo que sudar la gota gorda cuando Toranzo cerró de forma providencial ante un remate de Ceballos, para la conclusión de una primera mitad más que movida pese al calor.

Los cuerpos de los jugadores parecieron sentir el ritmo de la parte inicial y así el complemento fue bastante más chato. El equipo de Pascutti fue buscando sumar puntos para escapar a la zona de descenso directo, pero el cansancio lo privó de buenas ideas. San Martín esperó el momento de dar el zarpazo como tantas otras veces hizo en el semestre anterior, pero esta vez no llegó. La más clara en el complemento la tuvo Nadaya a los 20′ cuando metió un derechazo al que le faltó apenas un poco de puntería. Hrabina introdujo cambios para darle aire al medio, pero tampoco encontró la posesión del balón. Pese a ello a los 33′ Becerra, de gran encuentro, casi grita el cuarto gol con esta camiseta pero su zurdazo bajo y cruzado encontró la mano salvadora de Sánchez. Sobre el final llegó el momento del aguante para finalmente cerrar una tarea a puro calor y donde al puntero del torneo le quedó la sensación inequívoca que hizo negocio. Y redondo para más datos.