El trofeo de la Vuelta a San Juan 1989 era tan alto como él. Luego ganó dos más.
 

Si uno da una rápida ojeada a los calendarios de carreras de fines de los años "80 y de la primer lustro de los "90 verá que su nombre se repite varias veces. Ciclista completo, podía ganar embalando o subiendo. Prueba de ello son la gran cantidad de clásicas que tiene ganadas. Comparte el trío de corredores que triunfaron en siete.

"El Chato", al igual que Salvador Ortega y Marcelo Riveros, está un escalón abajo de Roberto Bernard, que ganó ocho. Junto a Darío Díaz tiene el récord de más Doble Calingasta ganadas (4). Claro que él lo hizo en la época que se corría por la Ruta 12, con todo lo que eso significaba. La Doble Media Agua de 1989 y las Mendoza-San Juan de 1990 y 94, completan el rosario de triunfos clásicos.

Cualquier aficionado al ciclismo puede afirmar sin equivocarse que Alberto Clemente Bravo integra esa elite de hombres que escribieron varias páginas doradas en el libro de la historia del ciclismo sanjuanino. Bastaría con las clásicas ya citadas. Ahora bien en su haber hay otro récord compartido y es el de haber ganado en tres ocasiones la Vuelta a San Juan, en los años 1989, 91 y 92.

"Si tengo que elegir un rival... Es difícil, sería más de uno -comenta Bravo- uno fue Daniel Castro, con quien viajamos a Italia y otro era Juan Curuchet. Había otros grandes ciclistas pero ellos dos eran los mejores de mi época. Con Castro disputé y le gané varias veces. A Curuchet no podía ganarle y lo hice en una Vuelta de Santiago del Estero", explicó quien luego de sufrir un accidente en una carrera en La Rioja, debió padecer una larga recuperación y nunca pudo cobrar el seguro. "Eran 9.180 pesos en los años 2000, yo no ví un peso, pero sé, porque me dijeron que un dirigente cobró el dinero", cuenta con resignación y un dejo de tristeza porque sólo el sabe lo que padeció.