Son amigos. Podría decirse que uno, Gastón Alto, mendocino de 24 años, creció admirando a su rival y amigo, el sanjuanino Pablo Tabachnik, 31 años. Los dos, junto al chino Liu Song, conforman el equipo de la Selección Argentina que participa en los diferentes torneos internacionales, incluyendo Juegos Olímpicos y Mundiales. Y, con la ausencia del asiático nacionalizado, son los favoritos para encontrarse en el partido final, de la categoría mayor, del Gran Prix del Sol, que comenzó ayer en el estadio Aldo Cantoni.

Los dos se deshacen en elogios, cuando se refieren al otro. Pablo, que hace diez años se radicó en Mendoza para empezar sus estudios de abogacía e iba a entrenar en el Club Regatas, vio en ese chiquilín flaquito condiciones que lo sorprendieron. "Era ágil, intuitivo, rápido, me pareció un gran proyecto y no me equivoqué. Es un jugador con una gran variedad de golpes y una permanente actitud ofensiva", comentó.

Para Gastón, que hace una década (cuando tenía 14 años) empezó a entrenar con Pablo que ya era un jugador consagrado, su posible rival en la final tiene un juego casi completo. "Es muy difícil encontrarle errores, hace todo bien. No voy a descubrirlo ahora", cuenta con un sincero respeto.

Ayer, mientras Pablo se debatía entre lo organizativo y lo deportivo, Gastón se admiraba del estadio y de la presentación del espectáculo.

"Esto le hace muy bien al tenis de mesa, creo que Pablo está logrando lo que pretendía que es promocionar nuestro deporte. Me encanta el escenario. Esto nos motiva mucho a jugar", expresó.

Conforme con el rendimiento de sus alumnos, varios de los cuales había superado la ronda inicial, Tabachnik, también confió su alegría porque todos los visitantes habían elogiado la organización. "Es una lucha -dijo entre sonrisas-, pero vamos bien. Nos sobra tiempo y podemos desarrollar todas las rondas de los chicos tranquilos", afirmó.

Cuando el tema de la conversación retornó sobre las posibilidades de cada uno en el certamen, los dos mantuvieron la misma sinceridad y, aún sabiendo que por su experiencia internacional parten con ventaja sobre otros participantes, tanto Tabachnik, como Alto, fueron cautelosos.

"A mi me hubiera gustado llegar en una mejor forma física. En este último tiempo estuve muy abocado a la organización del torneo y entrené poco. Pero igual, estoy en San Juan, mi casa y quiero responder al gran apoyo que me han brindado mis comprovincianos. Sacaré fuerzas de donde no tengo", dijo Pablo.

Por su parte, Gastón, contó que está pasando por un buen momento. "Yo llego bien, con muchas expectativas. Sé que si tengo que jugar con Pablo será difícil, como ocurre siempre. Nos conocemos mucho y creo que más allá de quien gane, será un gran partido", concluyó Alto.