Buenos Aires, DyN.

Un gran gol del paraguayo Aureliano Torres le dio a San Lorenzo de Almagro en su cancha un festejado triunfo por 1-0 ante Boca Juniors y lo subió a la punta del Torneo Clausura, al cabo de un clásico muy mal jugado por los dos, pero cuyo resultado deja en segundo plano cualquier otra conclusión. Iban 21 minutos del segundo tiempo, cuando Torres, aprovechando el espacio que se le brindó, sacó desde unos 35 metros un imponente zurdazo que dejó parado a Javier García. Esa pelota que se clavó en el ángulo superior izquierdo sirvió para resolver un partido en el que parecía claro que el que convirtiera un gol se quedaría con la victoria, aunque debe señalarse que desde el comienzo del complemento, San Lorenzo había sido el que marcaba el compás del juego.

Además del paraguayo, que con la sola importancia del gol le dio su apellido al clásico, en San Lorenzo debe destacarse la solidez y temperamento de Jonathan Bottinelli y algunos intentos de prolijidad de Néstor Ortigoza, pese a las pocas libertades con que contó.

Boca, en tanto, naufragó en su carencia de ideas, nunca le encontró la mano al juego, sufrió su tercera caída en cinco fechas del Clausura. El primer tiempo resultó intrascendente, ya que los dos equipos se enredaron en su propio desorden, se perdieron en un forcejeo en la mitad de la cancha, ninguno contó con un jugador que le diera sentido asociado al armado y así fueron pasando los minutos sin novedades. En el segmento más rescatable, que transcurrió entre el cuarto de hora y los 30 minutos, Boca contó con dos aproximaciones. La primera surgida por acción individual de Diego Rivero, quien luchó entre varios rivales y logró dejarle la pelota a Cristian Chávez, pero el remate desde cerca del mediocampista del seleccionado doméstico lo contuvo el arquero Pablo Migliore en dos tiempos. La segunda chance se dio a los 27. Hubo una escapada de Pablo Mouche por la derecha y un centro, pero Nicolás Colazo cabeceó muy alto.

Por el lado de San Lorenzo, sobre los 23, después de una duda en el fondo de Boca, Juan Carlos Menseguez ganó la pelota, jugó para el peruano Giancarlo Carmona y su centro localizó al uruguayo Juan Manuel Salgueiro, pero estuvo muy forzado facilitando la reacción de García.

En la etapa complementaria, las características no cambiaron demasiado. Antes del gol, Torres se había hecho ver con un buen tiro libre apenas desviado, a los 2 minutos, y a los 11, un tiro de esquina suyo fue cabeceado por Bottinelli y el balón tocó el palo derecho de García, antes de salir de la cancha.

Después del tanto, San Lorenzo cedió terreno y esperó para que Boca pusiera en desnudo todo lo que le falta, situación que no cambió con los ingresos de Walter Erviti y Ricardo Noir.

El partido no deja mucho margen para el optimismo, ni en uno ni en otro bando, aunque el valor de los tres puntos fortalece a San Lorenzo y lo deja bien encaminado, mientras que para Boca abre una semana negra seguramente cargada de deliberaciones.