“Ha sido una buena elección pasar de largo, cuando el resto de quienes embalaron por la meta volante, frenaran un poco su ritmo”, contó Roberto Richeze al final de la carrera.
Cuando se disponía a firmar la planilla en el último lugar (debieron llamarlo por los altavoces para que lo hiciera), el ciclista de la Agrupación Virgen de Fátima tuvo tiempo para realizar un breve análisis de lo que resta. “Esta es una vuelta muy linda, pero exigente. Creo que todavía la competencia está abierta, deberé hacer una buena crono para mantenerme como líder. A mi entender la contrarreloj puede ser decisiva, pero quien quede primero luego de ella, no debe perder de vista que le quedarán 100 kilómetros más que serán muy duros. El Campo de La Bebida y la subida al Jardín de los Poetas, demandan un gran esfuerzo”, concluyó.
