Buenos Aires 23 de febrero.- El comienzo de año de Boca no fue el esperado por los hinchas “Xeneizes”. El regreso de Carlos Bianchi al banco de la “Bombonera” generó muchas expectativas para un entrenador que no dirigía tras ocho años.
La derrota ante Deportes Tolima en su debut en la Copa Libertadores, la floja producción ante Quilmes y el empate con Tigre sin goles, obligaban al “Virrey” a conseguir los tres puntos y demostrar un juego convincente.
El espectáculo en Floresta comenzó enérgico. Los equipos se insinuaban pero no lograban lastimarse. La movilidad del “Burrito” Martínez, la fuerza de Santiago Silva y la precisión de de Walter Erviti eran las herramientas más destacadas de Boca. En cambio, los disparos de media y larga distancia de Oscar Ahumada y el vértigo de Iván Borghello constituían las armas más fuertes de All Boys.
Las emociones se vivieron en el complemento. Ninguno era favorito a romper el marcador, sin embargo, el que pegó primero fue el conjunto de Floresta: tras un pelotazo punzante, que complicó a los centrales “xeneizes”, el goleador del torneo, Oscar Ahumada, anotó el 1 a 0 que generó un “silencio atroz” en las tribunas de “la 12”.