Una historia conmovedora. Un trapo que no es común. Que no nació de juntar telas distintas, sino que está pintado sobre una base blanca. Que nació en las manos artísticas de una mujer sanjuanina y que viajó hasta Sudáfrica. Una bandera que se hizo famosa gracias a Graciela Moreno (55 años), que le cumplió un sueño mundial a su amigo Gabriel García (52 años), que es productor de televisión de un canal importante de Buenos Aires y fanático de Del Bono. Graciela en pocos días le pintó la bandera (mide 4 metros x 1.5) con los colores y el escudo Bodeguero (Celeste y Blanco) para llevarla y decir presente en Pretoria, donde se concentra la selección Argentina y Gabriel está trabajando para la empresa televisiva.
"No puedo creerlo, me parecía mentira cuando miraba la televisión, canal 7 y salió la bandera, que yo pinté. Al principio no creía que era la mía, pero después mi hijo Franco me dijo "mamá esa es tu bandera". Ahí la miré bien y me sorprendí, después no me quería lavar las manos", relató Graciela Moreno.
Tal repercusión tuvo la obra de arte, que fue el primer trapo Celeste y Blanco en pisar las tierras de Sudáfrica y con el sello sanjuanino. Gabriel apenas llegó a Pretoria se fue a donde está entrenando la selección Argentina y colgó la bandera, que fue vista por todo el país en varios canales de Televisión. ¿Que decía el trapo?, "Del Bono es mundial", fue la frase que Gabriel le pidió a la autora, pero ella (por Gabriela) le agregó "San Juan, Argentina". "Me faltó ponerle mi firma, me olvidé", señaló la artista.
Pero tal fue su fama de buena artista, que el hermano de Gabriel, Miguel le dijo que le hiciera y pintara una a él, pero con los colores y el escudo de San Lorenzo de Almagro. Club del cual es hincha. Graciela sin ningún problema la hizo y se la envió a Buenos Aires, ese trapo ya debe estar camino a Sudáfrica.
"La de San Lorenzo me costó un poco más, porque era un poco más larga que la de Argentina, pero con mi esposo Juan, que me ayudó bastante logramos terminarla también".
Gabriel nació en San Juan y vivió hasta ser mayor de edad. En la secundaria, conoció al esposo de Graciela, Juan Coralli, se hicieron grandes amigos y de ahí nace la amistad con la familia. Después el destino de la vida lo llevó a dejar la provincia. Se fue a vivir a Buenos Aires, donde comenzó a trabajar como productor de televisión para un canal nacional.
Todos los años Gabriel viene a San Juan a visitar a sus familiares y amigos.
La última visita inesperada fue el 18 de mayo pasado. Cayó de sorpresa a San Juan a visitar a sus amigos. Gabriel le pidió a Graciela que por favor, le hiciera y pintara una bandera de Argentina con los colores del club de sus amores, Del Bono.
"Gabriel es hincha de Del Bono desde chico, yo cuando lo conocí en la escuela secundaria ya era hincha del Bodeguero. Después jugamos juntos en el club, pero no duramos mucho. Dejamos por la escuela", recordó el esposo de Graciela, Juan. Una obra histórica, un trapo sanjuanino en Sudáfrica, el primero, que nació de las manos de una artista sanjuanina.