Si bien los accidentes menores y los vuelcos son infaltables en el Safari, el de ayer heló la sangre. En la zona conocida como El Collado, se produjo un accidente tremendo, donde el piloto Roberto Gómez salió despedido de su auto mientras daba tumbos. Dada la gravedad del caso, el piloto fue trasladado al hospital Rawson. El Dr. Ismael Luffi, quien atendió a Gómez, aclaró que éste había sufrido un "traumatismo encefálico con fractura de hueso temporal derecho, con otorragia bilateral", por eso fue derivado al nosocomio capitalino con pronóstico reservado.
El accidente se produjo sobre el mediodía, cuando el Fiat 128 de Gómez entró muy rápido al cruce del río, la cola del auto se elevó, la trompa se clavó y empezó a volcar. Y en uno de los tumbos, el cinturón de seguridad (simple y no el de tipo arnés, según comprobó este diario) se cortó o se abrió y Gómez salió despedido. El hombre quedó tendido en el suelo, ante la desesperación del público. Como el policía en el sector no tenía handy, dos espectadores en camioneta arriesgaron sus vidas para meterse en el circuito y avisar al puesto siguiente, donde el policía sí tenía un medio de comunicación. Ahí el agente pudo comunicarse con la ambulancia y entonces se detuvo la carrera. Gómez aún estaba conciente, pero después empeoró su estado, por lo que fue derivado al hospital Rawson. Su navegante no presentó lesiones de importancia pues quedó dentro del vehículo.