UPCN sólo sabe de victorias en este 2015 y esta racha positiva de seis victorias en el año (siete si se cuenta la última del 2014) lo llevaron al sitio de privilegio en las posiciones: la punta. El actual tetracampeón de la Liga Argentina venció anoche en el clásico local a Obras por 3-0, en un Aldo Cantoni casi desierto (hubo cerca de 200 espectadores), para ser el único líder, aunque con un partido más que uno de sus escoltas, Boca, y con un par por encima del otro segundo, Bolívar. Sin dudas, el único punto negativo de la noche para los Cóndores fue la lesión en el segundo parcial de uno de sus receptor-punta iniciales, Nicolás Lazo, quien debió ser reemplazado. En su lugar ingresó el flamante refuerzo, el alemán, Marcus Popp, quien llegó al club debido a la lesión que aún lo mantiene fuera de las canchas a Pablo Bengolea.
El comienzo del partido fue palo y palo, incluso con un Obras más concentrado y certero en la ofensiva. UPCN debió correr la mayor parte del parcial desde atrás y recién en la recta final pudo emparejar todo. El oficio y la experiencia del gremial hizo la diferencia para liquidarlo por 27-25. Ese resultó un golpe anímico imposible de asimilar para el equipo que anoche hizo de local en el Cantoni. Los pibes que conduce Alejandro Barrionuevo comenzaron a fallar demasiado y eso fue letal para UPCN, un equipo que hace de los errores adversarios, un arma contundente. El 25-18 refleja las diferencias en el volumen de juego de uno y otro club.
El tercero mantuvo la tónica del anterior, con el plus que Fabián Armoa decidió darle minutos a jugadores que habitualmente no ingresan mucho como Matías Salvo o el propio sanjuanino Gustavo Molina. Poco a poco UPCN construyó la victoria que la cerró con un contundente 25-15 para una alegría que vale doble.
